Los comités de empresa de Ence, tanto de la fábrica como de las oficinas centrales, así como representantes de los sectores auxiliar, logístico y forestal, han exigido la «reactivación inmediata» de la mesa de diálogo para abordar el futuro de la factoría tras la sentencia de la Audiencia Nacional que anula la prórroga en su actual ubicación. Además, han reclamado al Ministerio de Transición Ecológica que, en vez de convocarse nuevamente en Madrid, se celebre en Pontevedra.
«Que venga a Pontevedra, vea el problema que tenemos y nos dé una solución», ha instado la presidenta del comité de oficinas, Ana Cedeira, a la ministra Teresa Ribera. También ha advertido que la «continuidad» de los puestos de trabajo pasa por la «colaboración activa» de la dirección de Ence en la mesa de diálogo, por lo que los trabajadores no van a aceptar «que se pare la producción y cese de la actividad sin más».
Ana Cedeira ha apelado a las competencias de materia de política industrial de la Xunta para pedir la implicación del Gobierno gallego puesto que sus empleos están «en riesgo en un breve espacio de tiempo», ya que el plazo para la presentación del recurso de casación ante el Tribunal Supremo expira el 28 de septiembre. «Si nos lo inadmiten, hay que ejecutar la sentencia y eso va a implicar el cierre y que nos vamos todos al paro», ha urgido.
XUNTA «AUSENTE»
Por su parte, el secretario del comité de la fábrica, Pablo Bacariza, ha acusado a la Xunta de ser la «gran ausente» y permanecer «escondida», sin poner fecha a la petición de entrevista cursada al conselleiro de Economía, Empresa e Innovación, Francisco Conde.
«El Gobierno tendrá que poner los medios, la Xunta las alternativas y la empresa comprometerse a continuar produciendo mientras no se alcance esa solución», ha insistido Bacariza. «No podemos esperar más tiempo a sentarnos a hablar, desde abril ya pasó mucho tiempo y queremos que se convoque cuanto antes», ha recordado, situando el compromiso de la Secretaría de Estado de Medio Ambiente de convocarles antes del 10 de septiembre y pidiendo «más prioridad» para este conflicto.
«DEJAR PASO A OTROS»
Sobre la actitud de la empresa, Pablo Bacariza ha coincidido con Ana Cedeira en que los responsables de Ence deben «participar activamente» en las conversaciones. «Y si no son capaces de hacerlo, deben apartarse y dejar paso a otros que sí quieran aprovechar y tomar la iniciativa que continúe explotando esta industria, incluso llegando a cerrar el ciclo productivo», ha añadido.
En este sentido, Bacariza ha avisado que la empresa «no puede ser un convidado de piedra» en la próxima mesa de diálogo y se ha referido a otro posible «inversor que quiera apostar por esto».
«Una vez que la continuidad de la factoría en su actual emplazamiento ha quedado comprometida, asumir la negativa de la empresa a esta opción es algo inaceptable por los trabajadores», ha explicado el secretario del comité de la fábrica.
Los representantes del personal y de los sectores afectados mantendrán las protestas que, «en función de la respuesta de las Administraciones serán más o menos intensas», ha precisado Ana Cedeira. «Si sigue habiendo silencio las intensificaremos», ha asegurado, antes de sentenciar que «el único lenguaje que entienden los políticos es la movilización en la calle».