El 77,5% del territorio gallego está vetado a los parques eólicos y en el resto «no existe carta blanca» para su instalación, según ha destacado la directora xeral de Planificación Enerxética, Paula Uría.
Lo ha subrayado en respuesta al diputado del BNG Luis Bará, quien, en comisión parlamentaria, ha vuelto a trasladar la «alarma social» que genera el «auténtico ataque sobre todo al rural y a la gente que vive en el rural» de la multitud de proyectos en estudio.
Uría ha apuntado que mas de 100 iniciativas han sido rechazadas y la Administración autonómica ha informado desfavorablemente 39 de los proyectos planteados ante la administración central, pero para su implantación en la comunidad gallega.
En este sentido, la directora xeral ha reivindicado su apuesta por un sector «que sea compatible con todas las actividades y siempre con las máximas garantías» medioambientales.
«Apostamos por un modelo eólico ordenado. No se pueden autorizar en cualquier lugar, sino en áreas que están delimitadas», ha añadido. En este sentido, ha incidido en que «todos los proyectos que se solicitan y tramitan se someten a una evaluación ambiental rigurosa y con participación pública».