La Xunta, a través de su vicepresidente segundo y responsable del área económica, Francisco Conde, ha vuelto a responsabilizar al Gobierno central de la situación socioeconómica que atraviesa la comarca de Ferrolterra y que ha motivado la convocatoria este miércoles de una huelga general en esa comarca y en las vecinas de Eume y Ortegal.
El titular de Economía compareció en la Cámara este miércoles para responder a una interpelación presentada por el BNG, que, a través del diputado Ramón Fernández, demandó explicaciones a la Xunta por una crisis en Ferrolterra «que ya nadie se atreve a cuestionar» y que cree que fruto de «decisiones políticas» a lo largo de las últimas tres décadas.
«Pueden repartirse las culpas porque se alternan en el poder en el Estado», ha dicho Fernández en alusión a PP y PSOE para luego añadir que, en el caso de Galicia, la responsabilidad está únicamente en los populares, que han regido la comunidad «casi ininterrumpidamente» durante los últimos cuarenta años.
En su turno, el conselleiro ha incidido en que la situación que vive Ferrolterra es consecuencia «de la política de abandono» hacia Galicia del Gobierno de Pedro Sánchez «desde su llegada Moncloa», algo que «el BNG avala desde el primer momento».
«Venir a exigir lo que ustedes no son capaces de exigir a su propio gobierno no parece muy coherente», ha añadido Conde. «El BNG está apoyando el gobierno en el Ayuntamiento de Ferro del lado de socialistas y de Podemos. Está en el gobierno de la diputación de A Coruña con socialistas y Podemos. En España, gobiernan con socialistas y Podemos. Están gobernando al lado de socialistas y Podemos siempre que les conviene», ha asegurado el responsable autonómico.
A continuación, el vicepresidente ha manifestado que «no se trata de política industrial» pues «una parte muy importante» de la industria gallega «resiste a la crisis» como, a su juicio, demuestran sectores como la automoción, las conservas y la losa o datos como que Galicia sea segunda en balanza comercial y presente una caída «menor» a la media estatal en el Índice de Producción Industrial.
Para Conde, el problema está en «una política de transición ecológica injusta que cierra las térmicas sin alterantivas», «ignora» las «peticiones» de precios de energía «competitivos» y «pone en riesgo» la continuidad de Ence en la ría de Pontevedra.
«Si hoy Navantia no tiene carga de trabajo, hay un único responsable: el Gobierno socialista, que no fue capaz de ejecutar los 250 millones dejados en los presupuestos por el anterior gobierno en los años 2018, 2019 y 2020», ha espetado Conde, para luego añadir a sus críticas al Gobierno central que no haya conseguido «nuevos pedidos» para los astilleros de la ría de Ferrol.