Las estaciones de servicio gallegas vendieron a lo largo del año pasado una media del 30% menos con respecto al año anterior, a causa de la caída del consumo por las restricciones y cierres derivados de la covid-19.
Según los datos recabados por la Federación Gallega de Estaciones de Servicio (Fegaes), los establecimientos de la provincia de A Coruña presentan una caída media de sus ventas del 30%, con casos que llegan al 50% dependiendo de su localización.
En la provincia de Pontevedra, por su parte, la situación es similar: las estaciones de servicio del centro de las ciudades alcanzan una caída del volumen de ventas en torno al 33%, mientras que en las zonas más rurales la bajada está en un 20%.
Por su parte, en la provincia de Lugo se ha vendido una media de un 25% menos en ese período en la capital y ciudades más grandes. Sin embargo, en las estaciones situadas en el medio rural la caída se estima en un 20%. Finalmente, en Ourense, las cifras de la provincia también presentan una bajada que oscila entre un 21 y un 26%.
Durante el primer confinamiento, destaca Fegaes, algunas estaciones de servicio gallegas ubicadas en zonas rurales llegaron a perder casi el 90% de sus ventas.