La conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, ha presentado este martes una guía con una quincena de buenas prácticas a tener en cuenta para «intentar minimizar» el impacto de la minería en el paisaje gallego.
En un acto en un hotel de Santiago, la conselleira ha presentado esta guía técnica tras el convenio firmado hace dos años con la Cámara Oficial da Minería de Galicia y la Universidade de Vigo para la elaboración de las recomendaciones para el sector extractivo.
En concreto, se trata de la novena guía de la Colección da Paisaxe Galega de la Xunta, que aborda diferentes cuestiones. Estará disponible a partir de diciembre en la web de la Consellería y se editará para hacer llegar a profesionales del sector. Por su parte, el décimo y último título de esta serie, relativo a los miradores, estará listo en 2021.
De este modo, Ángeles Vázquez ha destacado que se trata de un «valioso» manual tras un estudio «exhaustivo» que incluye 15 fichas individuales.
Remarca que en Galicia hay «fantásticos» ejemplos de cómo la actividad extractiva puede ser compatible con el paisaje. Así, aboga por la «minería de transferencia», de forma que cuando se abra un hueco hay que «ir cerrando el anterior», al tiempo que hay que conseguir que las instalaciones «sean lo menos visibles posible».
RECOMENDACIONES
El catedrático de la UVigo Javier Taboada ha sido el encargado de desgranar estas recomendaciones, que pasan, entre otras cuestiones, por realizar canteras y establecer las escombreras en las partes en las que sean menos visibles a simple vista. Situarlas en la ladera «oculta» de las montañas o hacer explotaciones subterráneas son algunas de las propuestas.
Esta guía recoge medidas preventivas, correctoras y compensatorias de la actividad minera. Recuperar la topografía original, evitar grandes taludes, minimizar vías de acceso y mantener colores y materiales son algunas de las propuestas.
Entre otras cuestiones, se apuesta por las especies autóctonas para la ocultación de zonas de canteras, de forma que se integren como si fuesen montes para el ojo humano.
También se aboga por racionalizar el empleo de la iluminación exterior y el consumo de recursos hídricos, tapar zonas de aparcamiento o el agrupamiento de instalaciones para un menor impacto.