La Diputación de Pontevedra incrementa su presupuesto un 2,2% en 2021 hasta los 164,5 millones de euros. Además, trabaja en un Plan Especial con el que busca superar los 200 millones de estas cuentas a través de remanentes y fondos europeos, con lo que se buscará reforzar la inversión pública y reactivar la economía.

La presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, y el vicepresidente, Cesar Mosquera, han presentado este miércoles las cuentas provinciales adaptadas a «una situación excepcional» por el coronavirus bajo las directrices de la Agenda 2030 y sus 17 objetivos de desarrollo sostenible.

Así, se refuerza la política social, la innovación y la digitalización, la reactivación de sectores estratégicos como la cultura y el turismo, y el mantenimiento de la igualdad y el medio ambiente como ejes prioritarios.

Además, Carmela Silva ha destacado la situación de solvencia financiera de la administración provincial que «en la práctica» es de deuda cero.

Según ha informado, de los 41 millones de deuda que el gobierno se encontró en 2015, este año se consiguió reducirla a los 3,9 millones, mientras que para 2021 la previsión es bajar del millón.

«UN PROYECTO BIEN PENSADO»

Para la presidenta, «es un presupuesto que tiene muy claro qué es lo que se quiere hacer en esta provincia». El objetivo es «transformarla teniendo en cuenta el nuevo cambio de paradigma que se está produciendo en el mundo».

Asimismo, Silva ha subrayado que en el Gobierno provincial (PSOE y BNG) hay «un proyecto bien pensado, ideado y diseñado para hacer frente a la situación más dramática que lleva vivido la sociedad en los últimos 100 años».

AUMENTO DE UN 10% EN APORTACIONES A MUNICIPIOS

Por su parte, el vicepresidente César Mosquera ha asegurado que «la del próximo año va a ser la intervención más excepcional y potente de las que se hizo históricamente en esta casa para la intervención en la economía y en la sociedad».

Mosquera ha remarcado que la Diputación de Pontevedra «vuelve a ser la administración provincial de todo el Estado que más transferencias realiza a los municipios».

Según reflejan los últimos datos del Ministerio de Hacienda, aporta un 35,34% de los recursos, de forma que duplica el promedio del 18,2% del resto de las diputaciones provinciales.

En 2021, las aportaciones a los municipios aumentan hasta los 61,2 millones de euros, un 9,68% más que en 2020, con el Plan Concellos como «instrumento clave».

Por su parte, el refuerzo de la política social se incrementa en este presupuesto en un 3% al llegar hasta los 17 millones de euros. De hecho, se duplican las ayudas de emergencia y el gobierno deja abierta la creación de nuevas líneas según evolucione la crisis.

En materia de medio ambiente y políticas de sostenibilidad, el presupuesto aumenta casi un 11%, hasta los 35,5 millones de euros. También se refuerza con una su subida de un 7,7% hasta los 21 millones de euros la cantidad destinada a la reactivación del sector cultural, del turismo y del deporte.

CRITICAS DE COMISIONES OBRERAS

Por su parte, el secretario de la Sección Sindical de Comisiones Obreras en la Diputación de Pontevedra, José Ramón Piñeiro, ha denunciado públicamente el «atropello» que, a su juicio, acomete el gobierno provincial con los trabajadores en este presupuesto al «retirarle parte de sus derechos» conseguidos en las Mesas de Negociación y «amortizar puestos de trabajo» en servicios como el Parque de Maquinaria o la Imprenta Provincial.

Entre otras críticas, asegura Piñeiro que durante los dos mandatos de Carmela Silva al frente de la Diputación «aumentaron las desigualdades» entre el personal con diferencias salariales por desempeñar el mismo trabajo y que se crearon «plazas innecesarias» por «intereses de partido y de amistad».