La energía eólica supone un 47% de la demanda de electricidad de Galicia y 4.800 puestos de trabajo directos, según los datos de la patronal del sector, cuyo presidente, Manuel Pazo, estima que la crisis de la covid-19 «va a acelerar» la transición hacia la utilización de recursos limpios en un futuro que ve en buena medida en los parques marinos flotantes.
La Asociación Eólica de Galicia ha presentado este miércoles el informe ‘Impacto Económico y Social del Sector Eólico en Galicia’, cuyos datos han expuesto tanto Manuel Pazo como Enrique Doheijo.
Así, como principales cifras del sector eólico en la comunidad, el estudio recoge, para 2019, una contribución al PIB gallego de 581,4 millones de euros, lo que representa el 0,9% del total.
Con respecto al empleo, sitúa en 7.022 los puestos de trabajo asociados de manera directa e indirecta al sector eólico, 4.886 directos (un 45% más que en 2018, debido al desarrollo de nueva potencia eólica) y 2.136 empleos indirectos.
Cifra en 11 millones los abonados a los propietarios de los terrenos en concepto de alquiler y también reivindica «beneficios medioambientales», con un ahorro de importaciones de combustibles fósiles que estima en 1,8 millones de teps (255,7 millones de euros), junto con 5,4 millones de toneladas de dióxido de carbono evitadas (153,7 millones de euros).
En el apartado de la balanza fiscal, el saldo, según la asociación, supuso 118,2 millones de euros, de los cuales 60,5 millones fueron abonados «directamente» a la Xunta de Galicia y los respectivosayuntamientos.
Según la patronal, la industria eólica de Galicia tiene presencia «relevante» en todas las actividades de la cadena de valor, «incluso» en la eólica marina.
Al respecto, su presidente ha incidido en que la transición energética «es uno de los objetivos prioritarios de la Comunidad Europea» y ha opinado que «la crisis va a acelerar esta transición». En este escenario, considera que «el futuro de la generación es la eólica marina» y ha advertido de que Galicia «cuenta con todo» para su desarrollo, debido a la «diversificación del naval».
«Se está tanteando el mercado», ha indicado sobre este ámbito, que augura que será «primera fuente de generación en los próximos años en Europa», en concreto la eólica marina flotante.
Pazos ha destacado que el objetivo de la asociación durante los próximos cinco años es, «con la instalación de las previsiones» que tienen, poder «llegar a equilibrar demanda y producción eléctrica hasta conseguir que el 100% sea renovable».
Y acerca de solicitudes para en torno a 6-7 gigavatios en Galicia, ha indicado que «el ministerio está sacando durante todos estos meses todo tipo de regulación de nuevas subastas, accesos y conexiones…» en un intento de «ordenar el sector».
Su meta, según ha resaltado, es «recuperar» la instalación de unos 500-600 megavatios anuales en los próximos cinco años. «Sería nuestro deseo», ha incidido, antes de apuntar que, por la antigüedad de algunos parques, entran «en una fase en que se podrían repotenciar».
«ORDENAR PARA ATRAER»
En cualquier caso, ha constatado que «ahora la nueva Xunta y el Gobierno central tienen que ordenar» el sector y «las tecnologías en las próximas subastas se van a separar», por lo que «va a haber una cuota por tecnología, como es normal».
Ha visto «importante ordenar el sistema para atraer inversiones» tanto en lo que tiene que ver con la tecnología como con el personal cualificado. «Va a ser un proceso muy rápido y que tenemos que aprovechar», ha llamado la atención.