El presidente de la Federación Provincial de Empresarios de Hostelería de Pontevedra, César Ballesteros, ha estimado que la crisis derivada de la pandemia ha conllevado una reducción de un 40% en el empleo en el sector a nivel autonómico, así como que el ocio nocturno ha sido el más afectado.
Así se ha pronunciado tras participar en un paro de 10 minutos convocado a nivel nacional y una concentración realizada en Vigo de modo simultáneo a la que ha tenido lugar en Madrid para pedir medidas de apoyo al sector. A Coruña también ha acogido un acto similar en la mañana de este miércoles.
Bajo el lema ‘Salvemos la hostelería’, decenas de personas se han congregado ante la Plaza de la Constitución de Vigo con pancartas con mensajes como ‘Solo queremos justicia. Solo queremos trabajar’ y ‘Los bares de copas pierden entre 5.000 y 25.000 euros al mes’.
En este contexto, Ballesteros ha remarcado que el cierre del ocio nocturno está generando nuevas formas de relacionarse no seguras, como reuniones de amigos en entornos familiares.
Sin embargo, el presidente de la federación provincial de hosteleros ha incidido en que los establecimientos pueden garantizar el cumplimiento de las medidas de seguridad, por lo que ha llamado a las autoridades a poner el foco en el control de las fiestas privadas.
Además, ha criticado que se haya cerrado el ocio nocturno en la zona equiparándolo con el de otras partes del país pese a que, a su juicio, en los locales de la provincia de Pontevedra las medidas de seguridad se encuentran controladas.
Del mismo modo, ha asegurado que esta situación debe conllevar compensanciones para el sector dado que el cierre ha sido decretado «sin un motivo claro».
En este sentido, el representante de la Asociación de Ocio Nocturno en Vigo, Carlos Veleiro, ha afirmado que la mayor parte de los establecimientos de la ciudad se han ajustado a las medidas establecidas y ha destacado que no se han registrado contagios en locales reglados de la ciudad.
MANIFIESTO
Tras mantener dos minutos de silencio en recuerdo de las víctimas del coronavirus y en apoyo al los afectados por la crisis en el sector, representantes de la hostelería en la provincia de Pontevedra han leído un manifiesto.
De este modo, han reivindicado el «sobreesfuerzo» realizado por empresarios para adaptar sus locales a las medidas de seguridad y han lamentado que, pese a ello, se hayan visto obligados a cerrarlos o a restringir su horario de apertura. Sin embargo, han señalado que el clausura del ocio nocturno no ha conllevado un descenso de los contagios.
Asimismo, han reclamado la puesta en marcha de medidas de apoyo higiénico sanitarias coordinadas con las autoridades competentes que permitan una gestión eficaz ante posibles brotes y procesos de cuarentena.
En esta línea, han pedido la adopción de medidas de apoyo efectivo al empleo, con la ampliación de los ERTES hasta el fin de la pandemia, que se asegure una mayor exoneración de la cotización a la seguridad social a los negocios que tengan una apertura parcial y que esta alcance el 100 por cien para los que estén cerrados.
También han demandado actuaciones de apoyo a la estructura empresarial sectorial con recursos a fondo perdido para las facturaciones inferiores al 25% de lo habitual y la ampliación de dos años en los periodos de carencia de la financiación recibida por el COVID-19. Además, han solicitado bonificaciones fiscales en costes de arrendamientos y suministros, así como en impuestos especiales y tasas municipales.
Adicionalmente, han planteado que se articulen propuestas que estimulen la demanda, mejoras en el tratamiento fiscal y exoneración en vales de comidas, la reducción temporal del IVA en Hostelería y un Plan Estratégico de la Gastronomía. La concentración ha estado acompañada de una campaña en redes sociales bajo el hashtag #SalvemosLaHostelería.
REIVINDICACIONES
Mientras, en el marco del acto realizado en Madrid, el presidente de la Federación Nacional de Asocaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, ha reclamado el despliegue de un plan de emergencia para salvar al sector de la hostelería, ante el impacto adverso que ha sufrido por la pandemia.
Amor ha explicado que hay 85.000 negocios hosteleros que en estos momentos no han vuelto abrir o abrieron pero han tenido que cerrar por las restricciones sanitarias.
«O se pone en marcha ese plan de emergencia o desgraciadamente nuestro país se va a quedar sin muchas empresas, sin muchos empleos y sin muchos autónomos en el sector de la hostelería», ha advertido.
El presidente de ATA ha indicado que en estos momentos la hostelería lo está pasando «realmente mal», y ha apostillado que se trata de un sector que ha sufrido nuevas restricciones sanitarias, como el cierre del ocio nocturno o el toque de queda para dar servicio, pero no se han tomado medidas económicas.
Amor ha reivindicado al Gobierno que se diseñen nuevas medidas de emergencia ante lo que la organización considera una situación de emergencia. «En estos momentos, lo importante en nuestro país es salvar autónomos, salvar empresas y salvar empleos, y el sector de la hostelería es uno de los sectores donde hay que tomarse muy en serio estas cosas», ha concluido.