La frenética semana de campaña electoral disteis comicios repetidos puede traer sorpresas el próximo domingo. Y, en buena parte, porque muchos de los indecisos -en torno al 30% segundo algunos estudios demoscópicos hace un mes– comenzaron a decantarse por una u otra opción política. Así lo demuestran los distintos sondeos que manejan los partidos que siguieron recibiendo trackings diarios de diversas empresas demoscópicas.
Y los partidos peor parados son aquellos con poca visibilidad pública y los que no tuvieron protagonismo nos distintos debates que se celebraron. Así, la mayor masa de electores indecisos, tanto de la derecha cómo de la izquierda, comenzó a decantarse por dos formaciones concretas durante los últimos días.
Según información de distintos estudioss consultados por GCDiario, en esta polarización del voto no salen bien parados partidos como Más País, que en un mes habría dilapidado el efecto sorpresa que iba aparejado a su líder, Íñigo Errejón, ni tampoco formaciones nacionalistas e independentistas de las dintintas nacionalidades históricas. Un efecto que afectaría en Cataluña a JuntsxCat y ERC en beneficio de las CUP, en Euskadi a Bildu y en Galicia, al BNG. Una circunstancia que podría tener que ver con la crisis desatada en Cataluña tras la setenza del procés, que es, en parte, la que está movilizando más el voto de la derecha.
TENDENCIAS
En este sentido, estos sondeos apuntan a una fuerte subida de la ultraderecha de Vox en algunas circunscripcións, que podría dejar sin escaño a varias formaciones políticas en distintas provincias. De hecho, parece que es esta formación de ultraderecha la que más concentra el voto de esos indecisos que, en otras ocasiones, habrían votado por el PP o por Ciudadanos.
Así se explica, en parte, el giro del mensaje del PP nos últimos días, con ataques y críticas constantes a la formación que lidera Santiago Abascal, la última, la polémica de su número dos, Miguel Tejado. Con todo, no sería el PP el partido más afectado, sino Cs, que podría perder su representación en muchas circunscripciones electorales y dejarse más de la mitad de votos y escaños conseguidos en las elecciones de abril. Algo que ya apuntaban también las encuestas publicadas hasta el pasado lunes.
En el lado de la izquierda, los indecisos, según las informaciones que manejan los distintos partidos y a las que tuvo acceso GCDiario, bascularían hacia Unidas Podemos o sus distintas confluencias. Una movilización que tendría que ver con el efecto Vox, precisamente, para parar el avance de la ultraderecha. Estos estudios apuntan que, en este caso, y la diferencia del acontecido en abril, ese voto útil podría caer más de la banda del partido de Pablo Iglesias que en el de Pedro Sánchez. Una tendencia que se disparó tras lo debate la cinco del pasado lunes.
SON SÓLO TENDENCIAS
Con todo, estos estudios que manejan los partidos no dejan de ser estudios concretos de evolución de voto, en algunas ocasiones, condicionados por su limitado campo de investigación, con entrevistas que no superan las 1.000 entrevistas diarias. Por lo tanto, como ya pasó en algunos otros comicios, el desenlace final estará siempre en las urnas a lo largo del 10N.