Los efectos de las fuertes lluvias en los últimos días se notan aún en la comunidad, donde 15 ríos siguen en alerta por riesgo de desbordamientos.
En concreto, la Dirección Xeral de Emerxencias e Interior mantiene activo el plan especial ante el riesgo de inundación en Galicia (Inungal), en situación de alerta, ante posibles desbordamientos de los ríos Miño (en Lugo y a Peroxa); Azúmara, en Reguntille (Lugo); Louro (en O Porriño); Ladra, en Insua (Lugo); y Arnoia, en Baños de Mogas (Ourense).
En la misma situación están el Labrada, a su paso por Fraga (en Lugo); el Mera, en Ortigueira (A Coruña); el Mendo (en Betanzos); el Tambre, en Oroso (A Coruña); el Furelos, en Santiso (A Coruña); y el Ulla, también en Santiso; el Lérez (en Pontevedra); el Oitavén, en Soutomaior (Pontevedra); el Rego das Mesas, en Valdoviño (A Coruña); y el Dubra-Tambre, en Val do Dubra (A Coruña).
Según la información recibida mediante los sistemas de control y seguimiento, al superar los límites establecidos, estos cursos presentan un crecimiento significativo de sus caudales, por lo que pueden a llegar a darse desbordamientos puntuales.
LAS LLUVIAS REMITEN
En todo caso, aunque todavía hay algunos cortes de vías, MeteoGalicia no mantiene activo ya en la comunidad ningún aviso por riesgo de viento, lluvia o nevadas, según la información que difunde su página web.
Si en la pasada jornada daba por superado «lo peor» del temporal, la entidad de control meteorológico apunta en su predicción para este viernes que las lluvias fuertes remiten.
Así, señalan que Galicia queda en esta jornada en una situación intermedia entre altas y bajas presiones, con un frente poco activo rozando la comunidad, de forma que el cielo estará nublado con chubascos ocasionales durante el día, algo más activos por la noche y más probables al norte.
Además, las temperaturas experimentaron un ascenso notable de las mínimas y quedarán sin apenas cambios en las máximas. El viento soplará del noroeste, flojo en el interior y más intenso en la costa.