El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha asegurado este miércoles que la ciudad contará con unas «Navidades cien por cien seguras» para los vigueses y para los turistas que visiten la urbe, atraídos por el alumbrado, la decoración y otros eventos, ya que se pondrá en marcha un protocolo «muy riguroso» de medidas preventivas para evitar posibles contagios, en el actual contexto de pandemia de coronavirus.
Así lo ha trasladado el regidor en el acto de inicio de la colocación del alumbrado, que ha tenido lugar en el centro de la ciudad, y al que han acudido también la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, y varios concejales del gobierno vigués.
Caballero ha explicado que, en esta ocasión, la ciudad lucirá 2.700 adornos luminosos, instalados en 334 calles; y se engalanarán 450 árboles. «¡Va a haber 10 millones de luces LED! Me encanta decirlo, sé que esta frase va a dar la vuelta al mundo», ha proclamado, al tiempo que ha recordado que el coste de la iluminación de esta campaña es de «solamente 800.000 euros» (es un contrato plurianual ajudicado hace 2 años).
Preguntado por los medios acerca de otros elementos decorativos y atracciones, como la noria gigante instalada en las pasadas Navidades, Abel Caballero ha recordado que esas cuestiones todavía están en proceso de contratación. «Yo quiero una noria, y ya saben que no descarto poner una permanente en Vigo para hacerle la competencia al London Eye», ha aseverado.
En todo caso, y al margen del acto «cargado de simbolismo» de la colocación del alumbrado «de la mejor Navidad del mundo», Abel Caballero ha subrayado que, debido al actual contexto de crisis sanitaria, «va a haber cambios», y ha anunciado un protocolo «muy riguroso» con medidas de prevención para garantizar la seguridad y evitar contagios, y adaptado a diferentes posibles escenarios en función de la evolución de la pandemia.
PROTOCOLO «MUY RIGUROSO»
Así, aunque no ha entrado en detalles, el alcalde de Vigo ha avanzado que se establecerán aforos en las calles del centro, sin especificar cómo se van a controlar esos aforos; y ha señalado que el gran árbol luminoso que, hasta ahora, se colocaba en Porta do Sol, se trasladará a la calle Policarpo Sanz, que cuenta con mayor espacio.
Del mismo modo, ha confirmado que se repartirán las atracciones y decoración por diferentes zonas de la ciudad, y se implantarán «medidas mucho más estrictas» que las normas generales dictadas por las administraciones. «Ya lo hicimos en las playas, en las que hay seguridad al cien por cien», ha incidido.
Abel Caballero ha recordado que, en la pasada campaña navideña, unos 4 millones de personas visitaron el centro de la ciudad, y ha señalado que «en una ciudad cabe mucha gente». No obstante, ha insistido en que las medidas preventivas van a ser muy estrictas y se harán cumplir, «sin que tiemble el pulso». «Queremos una Navidad luminosa, extraordinaria, pero con seguridad», ha sentenciado y ha añadido, en tono de broma: «Este año sí que voy a invitar alcalde de Nueva York».