El Museo de Pontevedra exhibe desde esta semana las esculturas de los profetas Enoc y Elías. Dos de las piezas más valiosas de su colección que fueron realizadas por el taller del Maestro Mateo alrededor del año 1188 para la fachada exterior del Pórtico de la Gloria de la catedral de Santiago de Compostela.
Tras once años en las salas de reserva del Museo, y después de participar en muestras del Museo del Prado, del Pazo de Xelmírez y más recientemente en ‘Hospitalitas’ (2024) de la Fundación Las Edades del Hombre, regresan ahora al claustro del Edificio Sarmiento, donde se está renovando el espacio dedicado al prerrománico y al románico.
El vicepresidente de la Diputación, Rafael Domínguez, ha destacado que estas piezas forman parte del Museo desde 1956 y ha subrayado su valor histórico y artístico que «refuerza la importancia del Museo de Pontevedra como referente patrimonial en Galicia», afirmó.
Domínguez ha enmarcado esta incorporación en un «momento dulce» para la institución, que consolida una oferta cultural «de valor internacional» con la recuperación de la Bienal de Arte, la llegada de nuevas obras y ahora la instalación de estos profetas.
La directora del Museo de Pontevedra, Ángeles Tilve, ha defenido la vuelta de las esculturas como «muy especial», recordando su importancia histórica y su exhibición previa en el Edificio García Flórez y en el propio Sarmiento en 2014.
Las dos figuras, consideradas las más notables de las siete conservadas de la antigua fachada del Pórtico de la Gloria, destacan por su volumen, el tratamiento anatómico y los detalles de la barba y de la cabellera, que confirman su filiación con el taller mateano. Miden más de 1,7 metros y se exhiben sobre soportes específicos donados por la Fundación Barrié.
La instalación de estas esculturas marca el inicio de la recuperación completa del recorrido cronológico del arte gallega en el Museo de Pontevedra, desmontado en 2014 y ahora en plena reconstrucción. A lo largo de 2025 se incorporarán al espacio nuevas piezas prerrománicas y románicas, entre ellas laudas estolares de los siglos V al VII, capiteles de San Salvador de Setecoros, el disco ornamental de Sabanle, el tímpano de Palmou, diversos capiteles como los de Santa María de Bermés y la escultura de San Pedro procedente de Santiago de Gres.
Con este conjunto, el Museo aspira a ofrecer una visión renovada y coherente de la evolución artística de Galicia desde la prehistoria hasta el siglo XXI.

