La contaminación del aire urbano de Galicia cayó un 65,5% entre el 14 de marzo y el 30 de abril coincidiendo con el periodo de confinamiento, tal y como refleja el informe ‘Efectos de la crisis de la COVID-19 en la calidad del aire urbano de España’, elaborado por Ecologistas en Acción.
Para cuantificar estos datos, el estudio ha analizado los datos oficiales de dióxido de nitrógeno recogidos en las estaciones urbanas de medición de la calidad del aire existentes en las ciudades de A Coruña y Vigo durante los meses de marzo y abril de 2020, y los ha comparado con los de los diez años anteriores.
Con ello, el informe cuantifica que, durante el periodo de alarma, la contaminación del aire urbano ha caído un 61,5% de media, un descenso más acusado en Vigo (64%) que en A Coruña (59%).
La mejora de la calidad del aire en Galicia «está siendo general, tanto en los centros de las ciudades como en las periferias urbanas», apunta la asociación, en sintonía con las medidas generales de limitación de la circulación adoptadas.
Tampoco se detectan «grandes diferencias» entre las diversas prórrogas del estado de alarma, en las que se aplicaron restricciones de diversa intensidad, aunque la caída de la contaminación fue algo superior en el promedio del mes de abril (60% en A Coruña y 66% en Vigo) que en la segunda quincena de marzo (57% en A Coruña y 60% en Vigo).
Los niveles registrados durante el estado de alarma «son los más bajos para los meses de marzo y abril» del promedio de toda la década en ambas ciudades. Además, explican los ecologistas, «se mantienen muy por debajo del valor límite legal y la guía anual de la Organización Mundial de la Salud (OMS)».
En el total, de las 26 ciudades españolas de más de 150.000 habitantes analizadas, las gallegas se encuentran entre aquellas en las que se registraron mayores descensos. Vigo (64%) fue la sexta ciudad donde más cayó la contaminación, mientras A Coruña (59%) fue la undécima.