Un arrastrero ha emprendido un viaje hacia las aguas del Gran Sol este sábado desde Vigo para liberar a un lobo marino que apareció en Burela (Lugo) en enero.
La embarcación ha partido esta mañana del puerto de Vigo en un operativo que ha supervisado la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, para «garantizar la asistencia» del animal que apareció varado en la costa lucense con síntomas de deshidratación el pasado enero.
Después de recuperarse por completo, ahora el lobo marino, llamado Silbur, volverá a su hábitat natural. Devolverlo allí ha sido posible gracias a la «colaboración desinteresada» del armador que realiza el viaje y que lo cuidará hasta que lo suelte en las aguas del Gran Sol.
El caso de Silbur se remonta al 21 de enero, cuando fue encontrado en el puerto de Burela con síntomas de deshidratación, medía 110 centímetros y pesaba 27 kilogramos. En aquel momento se negaba a volver al mar y por ese motivo fue trasladado a la UCI de lobos marinos del establecimiento veterinario de la Coordinadora para el Estudio de los Mamíferos Marinos (Cemma).
Allí evolucionó de forma favorable, ganó peso hasta los 33 kilogramos y después de mejorar su estado fue trasladado a un tanque exterior del Instituto Galego de Formación en Acuicultura (Igafa) donde permaneció varias semanas hasta que se le dio el alta.
COLABORACIÓN
Ángeles Vázquez ha recordado en esta jornada que este tipo de acciones forman parte de la colaboración que la Consellería mantiene con Cemma desde 1999.
Los términos del convenio garantizan una asistencia de 24 horas al día por parte de los miembros de esta coordinadora, mientras que el departamento autonómico aporta la financiación necesaria. En este sentido, la conselleira ha indicado que en los últimos diez años se han atendido un total de 410 animales vivos dentro de este marco de cooperación.