La comisión de Peticiones del Parlamento Europeo estudiará si envía o no una delegación de eurodiputados a Galicia para comprobar en persona las denuncias por la contaminación provocada por la antigua mina de Touro y O Pino (A Coruña), que ahora un nuevo proyecto de la empresa Cobre San Rafael busca reabrir.
En concreto, los coordinadores de los grupos políticos de la Eurocámara valorarán esta posibilidad en sus próximas reuniones, según ha adelantado la presidenta de la comisión parlamentaria, la eurodiputada del Partido Popular Dolors Montserrat.
Montserrat ha explicado, tras el debate que ha tenido lugar en el Parlamento Europeo sobre este asunto, que la decisión de enviar o no un grupo de eurodiputados a Galicia para analizar ‘in situ’ la situación de la mina excede sus competencias y debe ser discutida entre los grupos políticos.
La eurodiputada del PSOE Cristina Maestre, en nombre del grupo Socialistas y Demócratas (S&D) y los representantes de Los Verdes que han intervenido se han mostrado a favor de enviar esta delegación, mientras que Francisco José Millán Mon, del PPE, se ha pronunciado en contra.
Así, la decisión se tomará en las próximas semanas y, mientras tanto, la comisión de Peticiones ha pedido a la Comisión Europea que les informe en caso de que hubiera novedades sobre el informe de evaluación de impacto del nuevo proyecto previsto para la mina de Touro.
«VÉANLO CON SUS OJOS ANTES DE QUE SEA DEMASIADO TARDE»
En el debate han participado varios peticionarios gallegos, de la red Contraminación –entre las que están la plataforma vecinal Mina de Touro-O Pino Non, Cova Crea y Petón do Lobo–, que han denunciado que las administraciones locales y nacionales no han tenido «nada en cuenta» sus denuncias y, en consecuencia, han acudido a la Eurocámara como último recurso.
«Vengan a Touro, vengan a Galicia, véanlo con sus ojos antes de que sea demasiado tarde y sólo puedan contemplarlo en las noticias», ha pedido Iria Ares, quien ha subrayado que llevan «años luchando» y ha solicitado a la Eurocámara que no permita el nuevo proyecto en la mina.
LOS RESPONSABLES SON LOS RESPONSABLES DE CUMPLIR LA LEY
El representante de la Comisión Europea, por su parte, ha recordado que la UE ha adoptado una serie de normativas que tienen el objetivo de «minimizar» y «corregir» el impacto que puede tener la industria extractiva tanto sobre el medio ambiente como en la salud humana, pero ha subrayado que son los Estados miembros los responsables de garantizar su «correcta aplicación».
El Ejecutivo comunitario también ha recordado que las autoridades nacionales tienen la obligación de gestionar las instalaciones abandonadas «de manera que no generen riesgos», mientras que sobre el nuevo proyecto ha sostenido que todavía no hay un informe de evaluación de impacto, por lo que «no es posible identificar ninguna infracción» de las normas europeas.
VISIÓN DE LOS GRUPOS
La socialista Maestre ha subrayado durante el debate que se trata de un asunto «bastante preocupante» y los afectados se enfrentan a una situación de «absoluta indefensión» por la «inacción» del Gobierno gallego. «No podemos esperar a que pase una desgracia», avisa.
Por su parte, la portavoz del BNG en Europa, Ana Miranda, ha mostrado su satisfacción porque la Comisión de Peticiones «decida mantener abiertas las denuncias» contra la mina de Touro, lo que valora como una «victoria colectiva».
Al respecto, Miranda solicitará el acceso a las instalaciones para que las pueda visitar la vicepresidenta de la Comisión de Peticiones, Ietoa Tatjana Znoka, que mostró su interés en conocer de primera mano la mina. Esta sería una visita previa a la misión oficial del Parlamento Europeo que, en caso de ser aceptada, tardará meses en ser programada, indica.
Por contra, Millán Mon ha criticado que se pretende «abrir una especie de causa general contra la minería en Galicia» y ha señalado que la petición es «superflua, prematura y carece de base». «La petición parece superflua, infundada y creo que puede empañar la imagen de la administración minera», ha expresado.