Los ganaderos de la comarcal de Ortegal, limítrofe con la de Ferrolterra y A Mariña, están preocupados por los continuos ataques que manadas de lobos están realizando en los municipios de este territorio, en donde aseguran que las muertes de terneros, vacas, ovejas, potros y caballos ya son a diario.
En la noche del pasado domingo al lunes, del 3 al 4 de octubre, un ganadero de As Grañas do Sor, en Mañón (A Coruña), comprobó impotente como los lobos acababan con la vida de dos terneros y dejaban heridos a otros dos, con las perdidas económicas que ello supone.
Ante esta situación algunos de los propietarios han decidido meter a los animales por la noches en cuadras, aunque para la mayoría esta es una decisión que no pueden tomar, ya que sus explotaciones están diseñadas para que los animales estén durante todo el día en las praderas.
FORMA DE VIDA
El alcalde de Mañón, Alfredo Dovale (PP), ha asegurado que esta situación esta motivando «un gran enfado por parte de esta gente, ya que estamos jugando con sus puestos de trabajo, ya que están perdiendo mucho dinero a causa de estos ataques». El regidor recuerda que la prohibición de dar caza al lobo está motivando el aumento de la población de este mamífero, «ya que esto va cada vez a más».
El alcalde del municipio limítrofe con la provincia de Lugo ha detallado que «los ataques ya son a diario y tenemos ganaderos que ya ha perdido bastantes animales y la gente se enfada», ha incidido.
Dovale también ha detallado que este problema con el lobo no solo está afectando a Mañón, si no que «también están dándose ataques en Ortigueira, As Pontes, Cerdido o As Somozas, ya que se está extendiendo demasiado» y por ello pide que se busque soluciones, «si es que no quieren acabar con los pocos habitantes que ya tenemos en la zona rural», además de destacar que «la gente comienza a tener miedo porque cada vez se acercan más a las casas y ya se han dado casos de ataques a perros, que también han fallecido».