La Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños, CEMMA, ha apuntado este miércoles que la causa más probable por la que vararon el pasado fin de semana en la zona de O Grove dos delfines fue un «error de navegación», después de que el temporal llevase a los animales a la entrada de la ría de Arousa y éstos perdieran sus referencias, desorientándose.
Varias unidades móviles de CEMMA acudieron el pasado domingo a O Grove, tras recibir un aviso de Emergencias por la presencia de dos delfines varados entre As Besadas y el islote de Loraña. Se trataba de una hembra adulta y un ejemplar joven de delfín común.
Los técnicos de CEMMA examinaron a los animales, que externamente presentaban un aspecto normal (salvo algunos ectoparásitos en las aletas, que les fueron retirados), y con apoyo de la veterinaria Olga Gómez les extrajeron muestras de sangre, antes de liberarlos.
Los análisis han confirmado que los delfines tenían buen estado de salud y, de hecho, no han vuelto a ser avistados, por lo que se da por hecho que se han reintegrado a su hábitat.
Es por ello que la hipótesis que cobra fuerza para explicar el varamiento es que sufrieron un «error de navegación». La noche anterior, han recordado desde CEMMA, Galicia sufrió un temporal que afectó también a aguas costeras, lo que pudo provocar que los cetáceos se acercasen a la entrada de la ría de Arousa y se desorientasen.
«Si los delfines llegan a la parte interior de la ensenada de A Toxa pierden sus referencias», han apuntado desde esta organización, y han explicado que, «por motivos que se desconocen», los delfines ven en el puente de A Toxa «una puerta cerrada», y tratan de salir a mar abierto atravesando la barrera de arena del istmo de A Lanzada, quedando atrapados.