Ganaderos convocados por el sindicato Unións Agrarias han repartido de forma gratuita este viernes en Santiago de Compostela más de 1.000 kilos de carne para protestar contra los bajos precios que reciben, por debajo de los costes de producción.
En una abarrotada Praza do Toural dada la presencia de decenas de ganaderos y de personas que acudían a recoger alguna de las bandejas con carne que se repartían, los ganaderos han buscado la complicidad de los consumidores ante esta problemática. Además, han hecho un llamamiento a las administraciones para que actúen con el objetivo de que el precio que reciben les permita obtener un margen de beneficio para vivir dignamente de su trabajo.
En declaraciones a los medios, el secretario xeral de Unións Agrarias (UU.AA), Roberto García, ha denunciado la difícil situación que atraviesan 11.000 explotaciones en Galicia, «prácticamente todas familiares y sin empleados» y que producen una «carne de extrema calidad» mediante un modelo de producción extensivo y que pierden «unos 200 euros» con cada ternero.
En este sentido, ha considerado necesario que los consumidores que sepan que una forma de «ayudar» a estos ganaderos es diferenciar este modelo «artesanal» de otros «industriales» a la hora de optar por el producto en el supermercado. Además, ha dejado claro que no piden «cobrarle más» al consumidor, sino que «haya una transparencia en cómo se reparte» lo que un consumidor paga por un kilo de carne.
Roberto García ha destacado que el modelo artesanal representa a una explotación que gestiona el territorio, el medio ambiente, y que supone la principal barrera de lucha contra el fuego y el cambio climático. «Cuando desde el Gobierno se hace un ataque al consumo de carne sin diferenciar los dos modelos, se está atacando al principal valedor del territorio y del medio ambiente», ha considerado.
«CRISIS SIN PRECEDENTES»
Asimismo, ha hecho hincapié en que este tipo de granjas han soportado una «crisis sin precedentes» durante los 18 meses de pandemia con el cierre de la hostelería, toda vez que se trata del sector en el que se consumían las piezas más valoradas de los becerros, como son los solomillos y los chuletones.
Este cierre, ha indicado, provocó «una caída del precio del más del 28%». «Y cuando aún no estamos recuperados de ese proceso…, nos encontramos con la otra factura, que es la que nos están pasando las compañías eléctricas, de venta de gasóleo, los abonos, nos piensos…», ha censurado para asegurar que este aumento de los costes tiene lugar en un contexto en el que el precio de la carne continúa siendo el mismo que en el año 2011.
«Si a eso le sumamos que lo que paga el consumidor no llega al ganadero porque queda en la mano del intermediario, nos encontramos con que producir un kilo de carne cuesta, según los datos del ministerio 5,35 euros, pero el ganadero cobra una media de 4,20 o 4,30 euros», ha precisado.
Así las cosas, ha lamentado que un productor pierda al año unos 200 euros con cada ternero, la misma cantidad que «gana un tratante por el simple hecho de cogerlo en la cuadra y llevarlo al matadero». «No podemos asumir que se esté permitiendo que se cometa la ilegalidad de que se les pague por debajo de lo que les cuesta producir», ha sostenido Roberto García, que ha recordado que la Ley de la cadena alimentaria señala que «el eslabón de abajo» no puede recibir un precio inferior al coste de producción.
OTRAS ACCIONES
El sindicalista ha dicho que la de este viernes es la primera de las acciones incluidas en un calendario de movilizaciones que el sindicato pondrá en marcha para reclamar un precio justo para los ganaderos.
Así, ha avanzado que la próxima semana emprenderán acciones legales contra el incumplimiento de la ley de cadena alimentaria y «forzarán» a los mataderos a la puesta en marcha de meses de transparencia en la configuración de los precios.