La Asociación pola Defensa da Ría (APDR) de Pontevedra ha alertado sobre la presencia de un «llamativo» vertido situado en la autovía de Marín, en las inmediaciones de la factoría de Ence, cuyo origen cuestiona si procede de las obras de ampliación del paseo peatonal «por el arrastre de tierras» o «si una vez más se trata de un vertido de Ence». Con todo, la empresa ha rechazado esas «acusaciones» argumentando que «la infraestructura por la que se evacúa este vertido está muy alejada -cerca de dos kilómetros- del emisario» de la fábrica.
«En tanto no tengamos información veraz no vamos a achacar a nadie la responsabilidad», ha afirmado el presidente de la APDR, Antón Masa, quien ha exigido al Ayuntamiento y a la Xunta que abran una investigación para identificar la autoría de este vertido detectado el pasado domingo y aplicar «las correspondientes sanciones». Masa ha calificado de «incomprensible» que sigan produciendo este tipo de vertidos «y más en una zona que tiene en el marisqueo su razón de ser y el trabajo de muchas mujeres y hombres que dedican sus esfuerzos» a esa actividad.
En este sentido, el presidente de la Asociación Vaipolorío, Gonzalo Sancho, ha coincidido en que, a causa de las continuas precipitaciones, los bancos marisqueros del fondo de la ría de Pontevedra están recibiendo «a diario» abundante contaminación desde los últimos meses procedente de vertidos como los que afectan al río Gafos, denunciados por ambas organizaciones ecologistas. «Se mezclan aguas pluviales con fecales y saltan las alcantarillas», ha asegurado Sancho en declaraciones a Europa Press, poniendo como ejemplo un pozo de registro desbordado en el lugar de O Marco.
AUGAS DE GALICIA
Augas de Galicia está pendiente del resultado de las analíticas tomadas por personal del Plan de Control de Vertidos tras la inspección que los agentes de la guardería fluvial realizaron en la zona. Desde la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade han señalado que el 112 notificó una alerta recibida en este servicio de la Xunta, situando el origen del vertido en un canal de la parroquia de San Andrés de Lourizán que discurre «atravesando las instalaciones de la Estación Depuradora de Aguas Residuales de Placeres».
El personal de Augas de Galicia apreció un «olor a hidrocarburos de origen desconocido» en el canal, que presentaba un «caudal medio de aspecto transparente». Las muestras de agua se tomaron «aguas arriba de la EDAR de Placeres y aguas abajo de estas instalaciones, antes de la canalización del curso de aguas naturales bajo la carretera de Marín».
ENCE
Por su parte, Ence ha precisado que el caudal de carácter líquido procedente de la factoría llega al medio marino a través de un emisario submarino «después de ser depurado» en su planta de tratamiento «para evitar que impacte negativamente en el medio receptor».
La empresa pastera ha insistido en que se trata de «un proceso plenamente controlado y respetuoso con el medio ambiente que, en ningún caso, supone una afección para la ría de Pontevedra», por lo que el vertido «no guarda ningún tipo de vinculación con la compañía, en contra de las acusaciones difundidas por la APDR», que habría apuntado a un supuesto caso de «mal funcionamiento en el proceso productivo» o a la presunta realización de «obras en el recinto fabril para las que Ence no suele pedir los permisos preceptivos».
SENTENCIA
Precisamente, el Gobierno local de Pontevedra ha dado a conocer una sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Pontevedra que desestima un recurso presentado por Ence a raíz de que el ayuntamiento paralizase unas obras de eficiencia energética que la empresa inició en 2018 y para las que no llegó a solicitar la licencia municipal amparándose en el Plan Sectorial.
La portavoz municipal, Anabel Gulías, ha calificado este dictamen como un «varapalo importante» para Ence y que confirma la validez de la actuación realizada desde la Administración local. Gulías ha destacado que el Plan Sectorial no recoge las obras proyectadas por la fábrica, que «deben requerir los trámites ordinarios, como a cualquier empresa».
Así, ha anunciado que el personal del Ayuntamiento visitará «inmediatamente» la factoría para hacer una valoración de las actuaciones realizadas y «saber en qué punto se encuentran», además de «valorar la posibilidad de una sanción y esperar a que la empresa haga la solicitud de licencia y abone las tasas». La portavoz del Gobierno local ha concluido que espera «que no sea el último» varapalo para Ence, a la que ha advertido que «ninguna empresa está por encima del bien y del mal».