Un proyecto de investigación de la Universidade de Santiago de Compostela (USC) para desarrollar una vacuna contra la COVID-19 ha recibido una aportación de 20.000 euros por parte de la empresa de vehículos especiales Urovesa, que se ha incorporado a la campaña de mecenazgo de la institución ‘Sumo valor’ para apoyar sus investigaciones.
El proyecto está liderado por el profesor José Martínez Costas y trata de desarrollar una vacuna contra este coronavirus mediante micro/nano esferas, una metodología «ya desarrollada» y aplicada «con éxito en dos virus de interés veterinario», ha dicho el investigador.
José Martínez, que se ha mostrado «muy agradecido» por esta aportación, ha explicado que dará «un poco más de impulso» a esta investigación. Actualmente, el grupo ya tiene listo una primera versión y «casi» terminada la segunda, que se testarán inicialmente en Madrid y, cuando se encuentre la más efectiva, se probará en Alemania.
Tras la firma del convenio de colaboración, el director científico del CIQUS de la USC, José Luis Mascareñas, ha hecho una defensa de la investigación básica, que es «fundamental para toda la investigación aplicada» y se ha mostrado «esperanzado» con los resultados de esta investigación.
Con respecto a la actividad de este centro, Mascareñas ha explicado que cinco grupos de trabajo del CIQUS están realizando actualmente investigación relacionada con el coronavirus, tres en antivirales y dos en vacunas. Asimismo, ha subrayado que, de los 10 proyectos financiados en España para el desarrollo de vacuna, dos son de este centro.
FINANCIACIÓN ESTRUCTURAL
Para cerrar el acto, el rector de la USC, Antonio López, ha reivindicado el valor de la investigación, el elemento «más grande» que la universidad puede proporcionar a la sociedad. Sin embargo, ha hecho hincapié en que este tipo de conocimiento «no se improvisa», si no que nace de «un trabajo continuado, de años» en la institución.
Para apoyar a sus investigadores, la USC lanzó precisamente un programa de mecenazgo con el que se intenta que tanto las empresas privadas como la sociedad se hagan «participes» de su actividad.
Antonio López ha recordado que esta pandemia «puso en evidencia que la investigación es crucial». Para su desarrollo, ha determinado, son necesarios más recursos, así como que se gestionen «de otro modo». «Es inmanejable que se haga a través de subvenciones», ha dicho el rector, que ha pedido fondos que garanticen el «trabajo basal» y «estructural» de estos centros.