La Xunta ha extendido la situación de prealerta por sequía a la totalidad de la demarcación hidrográfica Galicia Costa como medida para extremar la vigilancia por la escasez de precipitaciones de los últimos meses que, no obstante, todavía no ponen en riesgo el abastecimiento de agua.
Así lo destaca la Administración autonómica tras la reunión de la Oficina Técnica da Seca, celebrada en la mañana de este miércoles y de la que ha salido la ampliación a todos los sistemas del norte de la cuenca de una situación de prealerta que, hasta el momento, presentaban niveles de normalidad.
De este modo, la totalidad de la demarcación pasa a estar en prealerta por sequía, declarada el pasado 7 de febrero en doce sistemas del sur de la demarcación. Ahora, se extiende a los siete del norte que permanecían en parámetros de normalidad: río Eume y ría de Ares; Ferrol; río Mera, ría de Santa Marta de Ortigueira y ría de Cedeira; río Sor, ría Santa Marta de Ortigueira y ría de Viveiro; río Landro e río Ouro; río Masma, y ría de Ribadeo.
Con todo, la Xunta resalta en un comunicado que no se preven episodios de escasez y que el abastecimiento en los «grandes sistemas» está garantizado. Así, el embalse de As Forcadas está al 85%, el de Eiras, al 87%, el de Cecebre, al 74% y el de Zamáns, al 93%. La ocupación media es del 81,92%, sólo un punto por debajo del nivel del hace un año.
VIGILANCIA EN INDICADORES
Así las cosas, después de un mes de marzo en el que la media de precipitaciones fue de 125 litros por metro cuadrado, concentrados fundamentalmente en las primeras dos semanas; la decisión persigue extremar la vigilancia en el seguimiento de los indicadores.
El que más preocupa es el cuadal circundante en ríos que presenta un comportamiento paralelo a las precipitaciones, dado que las lluvias del tercer mes del año no fueron suficientes para recuperar la normalidad de los niveles freáticos que alimentan los cursos fluviales.
Y es que en marzo se elevaron los caudales hasta mediados del mes pero, con el tiempo seco de la segunda quicena, hubo un descenso progresivo hasta situarlos por debajo de los niveles habituales para esta época del año.
De este modo, los caudales circundantes de la demarcación fueron de 85 metros cúbicos frente a los 200 de enero, niveles ambos por debajo de la serie histórica.
En definitiva, la Administración autonómica subraya el objetivo de anticiparse con esta declaración a posibles problemas con escasez de agua, por lo que apela a la ciudadanía a hacer un uso responsable de estos recursos.