Los principales sindicatos en Galicia alertan de que más de 400.000 gallego se encuentran en paro o afectados por un ERTE, más allá de los datos «coyunturales» de mayo con una bajada del desempleo y un aumento de las afiliaciones. Por ello, demandan política activas de empleo con un plan de choque.
UGT Galicia reclama un «plan de reconstrucción» para superar la crisis por el coronavirus, debido a su impacto entre jóvenes, mujeres y sector servicios como más afectados.
Aunque los datos «revelan la retardación del ritmo de destrucción de empleo debido a la reactivación por la deshibernación de los sectores productivos», observa que queda clara la necesidad de extender las medidas de protección ante la gran cantidad de afectados.
A este respecto, UGT ve como «fundamental» el recientemente aprobado por el Gobierno central ingreso mínimo vital como instrumento «absolutamente esencial» para dar cobertura a las personas que se encuentran fuera del sistema de protección.
CIG PIDE LA «DEMOLICIÓN DE LA REFORMA LABORAL»
Por su parte, la CIG hace hincapié que más del 30% de la población activa gallega está en situación de desempleo, pese al ligero descenso del paro en mayo «como consecuencia del leve aumento de la actividad en el sector de la construcción en la provincia de Pontevedra».
Además, remarca que el paro aumentó un 18,8% en lo que va de año respecto al mismo periodo de 2019, mientras el número de parados desde que se inicio la pandemia creció en 24.853 en Galicia, a lo que hay que sumar los más de 200.000 trabajadores en ERTE.
Por ello, la CIG insiste en aplicar un plan de empleo en Galicia «basado en la demolición de la reforma laboral, en la inversión pública y en la participación pública en el tejido industrial».
CC.OO. LLAMA A LA XUNTA A COMPLEMENTAR PRESTACIONES MÁS BAJAS
CC.OO. considera que las políticas de estímulo son «más necesarias que nunca», por lo que urge a la Xunta a actuar en el ámbito de sus competencias y que acompañen a las medidas estatales.
Y es que resalta que si el Estado no hubiese adoptado medidas para el mantenimiento del empleo se trataría de una «crisis del empleo sin precedentes». Mientras, reduce la bajada del paro en mayo a una situación «coyuntural» por ser la economía gallega menos dependiente del turismo y debido a la «deshirbenación» de sectores por la desescalada.
Además, insta al Gobierno gallego a reforzar las redes de protección social, por lo que requiere que dedique el presupuesto que destinaba a la renta gallega de inserción social (Risga) a complementar las cuantías de las prestaciones más bajas, como puede ser el caso de las pensiones no contributivas o del ingreso mínimo vital.