Las secciones sindicales de la CIG y la CGT en Navantia Ferrol han acusado a las otras organizaciones presentes en el comité de empresa, CCOO, UGT y MAS, de permitir retomar la actividad en este astillero sin garantizar las seguridad de los trabajadores, sobre todo por estimar que el protocolo pactado entre dirección y representantes de los trabajadores, en el comité de emergencia, continúa sin aplicarse tal y como este recoge.
Así, la CIG ha señalado que uno de los motivos de impedir la entrada de los trabajadores de la empresa principal y de la industria auxiliar este miércoles, 20 de mayo, era que en el turno de mañana «no se podrían incorporar más personas que las que entraron el viernes pasado, 15 de mayo», cuando ahora se ha permitido.
El sindicato nacionalista también ha incidido en que es necesario «comprobar si se cumplen las promesas hechas por la empresa, como la incorporación de veinte personas de Acciona», empresa encargada del servicio de limpieza en el astillero, y será entonces cuando, a su entender, «se valorará la incorporación de todo el personal previsto para esta semana».
Por otra parte, reclaman que tanto Navantia y como las empresas auxiliares «tienen que hacerse cargo de los salarios de los trabajadores, dado que se trata de un paro técnico», además de impedir «que las empresas detraigan vacaciones u horas de disfrute a los operarios».
PREGUNTA
Es por ello que la sección sindical de la CIG en Navantia Ferrol ha apuntado que «desgraciadamente, la decisión de la mayoría del comité fue el asumir las promesas de la dirección, y por lo tanto que se reincorpore todo el personal que el martes estaba en activo, incluso asumiendo la posibilidad del incumplimiento de estas promesas».
Esta central se ha preguntado «de qué valió entonces la movilización de este miércoles» o si «era solo una excusa para que alguien se lavara la cara», además de destacar que «con la salud no se juega, la empresa tiene que dar pasos lo más seguros posibles y hacer la reincorporación poco a poco y con prudencia».
SECCIÓN SINDICAL DE LA CGT
Por su parte, la sección sindical de la CGT, ha asegurado que «la paralización de Navantia Ferrol demostró» lo que han venido manteniendo, «y es que la seguridad no está garantizada».
Así, ha trasladado que «el martes por la tarde, el comité estimó que no había condiciones de prevención y decidió paralizar la actividad al día siguiente», pero ha cuestionado: «Si el martes no se daban las condiciones y el miércoles no se trabajó, incluida la limpieza, ¿cómo es posible que el comité decidiera que este jueves si hay condiciones para trabajar?».
CGT ha constatado que «solo con la acción de parar un día la empresa ya accedió a aumentar el personal de limpieza, más del que se consiguió en cinco semanas de debates con la dirección y comité de emergencia sobre deficiencias, propuestas o medidas».
Por último, ha asegurado que se opuso en la reunión de la permanente del comité de empresa a retomar la actividad y que expuso estos argumentos: «para que haya el reingreso de trabajadores, primero tienen que estar garantizadas las condiciones de seguridad, esas condiciones pasan por hacer inversiones en recursos materiales y humanos concretos, a lo que Navantia se resiste». También ha reclamado «establecer un plan de lucha sindical para que los trabajadores no paguen los platos rotos de esta crisis».