El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha sugerido este lunes que la Junta Electoral Central debería hacer una interpretación «flexible» de la normativa para facilitar, en la actual coyuntura, que los gallegos puedan ejercer el 12 de julio el derecho a voto de forma «responsable, sin miedo y en libertad».
A su modo de ver, y aunque ha precisado que él no tiene en principio esa competencia, sería conveniente facilitar que personas vulnerables puedan no estar en una mesa electoral, o cuestiones como el voto por correo y mediante fedatario público.
De hecho, ha sido preguntado expresamente por los gallegos que viven en residencias y ha explicado que, ante esta coyuntura, «si hay una persona mayor que no puede salir de una residencia para votar, claro que puede hacerlo a través de un fedatario público, como ya sucede en las elecciones municipales o generales».
Feijóo ha subrayado que, en este caso, las fórmulas «son exactamente iguales al resto de elecciones democráticas», pero también ha sido preguntado por otras situaciones que podrían darse, como que haya quien pueda negarse a estar en una mesa electoral por riesgo para su salud o qué sucederá con aquellos gallegos que tienen alguna enfermedad si son llamados a formar parte de las mismas.
Preguntado acerca de si, en esta coyuntura, alguien podría ser sancionado por negarse a ir a una mesa electoral, ha replicado que él no es «competente» para pronunciarse al respecto ni le corresponde «sancionar a nadie». «Acabo de solicitar una interpretación flexible de las obligaciones que tienen las personas que resulten electas para formar parte de las mesas», ha proclamado.
A renglón seguido, ha interpretado que, igual que una persona que está de baja por enfermedad puede alegar esta cuestión para no acudir al colegio electoral, «alguien confinado podría alegar ese hecho incontestable». «Y entiendo que la Junta Electoral tiene que aceptar esa alegación, son principios básicos de derecho vigentes en cualquier momento», ha aseverado.
FAVORECER EL VOTO POR CORREO
Aún consciente de que hay una legislación electoral que es preciso «cumplir» y que determinadas precisiones le tocará hacerlas a la Junta Electoral, ha explicado que la Consellería de Presidencia estudia qué criterios serían «recomendables» para garantizar la seguridad, recomendaciones que también analizarán los expertos del comité clínico que asesora al Ejecutivo autonómico desde el principio de la pandemia.
«Si es posible excluir apersonas vulnerables de las mesas, sería positivo. Pero no sé si es posible con la legislación. Esperemos tener la interpretación más favorable para cuidar la salud de las personas (…) Me gustaría que hubiese la interpretación más amplia para favorecer el voto por correo o mediante fedatario público», ha dicho.
También ha reiterado que habrá que garantizar la distancia de seguridad para votar y se ha mostrado partidario de dar «facilidades» desde el punto de vista del horario en los colegios electorales.
Así, aunque entiende que la ley determina que los centros cierran a las 20,00 horas, ha asegurado que, dado el carácter excepcional de la convocatoria, aquellas personas que estén en el colegio o en las inmediaciones del mismo deberían poder votar aunque se supere esa hora.
«Estamos finalizando un informe de recomendaciones; lo contrastaremos con la Asesoría Jurídica y la Junta Electoral», ha avanzado el presidente gallego, quien ha defendido que el objetivo debe ser «facilitar el voto sin miedo, responsable y en libertad».
PETICIÓN DE COLABORACIÓN A SÁNCHEZ
Feijóo, quien en su intervención ha asegurado no tener constancia de que el candidato popular vasco haya censurado el «interés electoral» de Iñigo Urkullu al convocar el 12 de julio, ha vuelto a defender que la opción «más prudente» es convocar los comicios en la fecha más cercana que permite la ley.
«La diferencia entre hacer las elecciones en julio o en septiembre es un millón de turistas más. Si el turusmo baja en un 50%, pues medio millón. Una diferencia sustancial, clave», ha defendido el presidente, quien ha insistido en que el reto debe ser garantizar todas las medidas de seguridad.
Para ello, ha asegurado que espera la «colaboración» de la Administración central y así se lo ha demandado, según ha revelado, en una conversación, al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.