El portavoz de Acerga –la principal asociación del cerco en Galicia–, Andrés García, reclama que «se tengan en cuenta» los últimos estudios sobre el ‘stock’ existente de sardina y se aumente la cuota, porque «hay mucha más de la que se está diciendo».
Así se ha pronunciado después de que el Boletín Oficial del Estado (BOE) haya publicado este martes la orden por la que se regula la pesquería de sardina, en una campaña que arrancó el pasado 4 de mayo para los barcos gallegos y del Cantábrico noroeste.
Los barcos del cerco gallego y del Cantábrico noroeste pueden pescar hasta el 31 de julio casi 2.000 toneladas de sardina mientras no se agote. El tope por barco en mayo será de 1.000 kilos al día, mientras que con la llegada de junio –mes de San Juan– son 1.500 kilos al día. La talla mínima es de 15 centímetros –con 500 kilos al mes de entre 11 y 15 centímetros–. Para el ‘xeito’ se reservan casi 82.000 kilos.
La flota de cerco del Golfo de Cádiz anunció esta semana que capturará la sardina en los meses de verano al considerar «insuficiente» el cupo de 1.240 toneladas impuesto por la Secretaría General de Pesca para este 2020 a los 82 barcos que faenan en esta zona.
Al respecto, García señala que el caso de Galicia es diferente. «Si tuviésemos otra pesquería, pero no la tenemos… O pescamos sardina o no pescamos nada», afirma. Y es que «el jurel falló completamente», por lo que «o se va al mar y se pescan sardinas o se excusa ir al mar».
ESTUDIO PELAGO20
Así, remarca que el último estudio realizado, el Pelago20, que recorrió la costa de Portugal y Golfo de Cádiz constata «un aumento considerable» de sardina «comparado con el año pasado».
Este estudio se realiza con el buque oceanográfico Miguel Oliver, de la Secretaría General de Pesca, y evalúa los principales recursos pesqueros.
Asegura que la costa gallega está «llena de sardina», y «prueba de ello» es que está pescando por todo el litoral, «no solo en una zona».