La reunión entre el Ministerio de Educación y los responsables del ramo en las comunidades autónomas ha dejado diversidad de opiniones en la comunidad educativa gallega, al menos entre los sindicatos de profesorado, que a pesar de que valoran la apuesta por la evaluación continua y la promoción, han trasladado su preocupación por una sobrecarga del próximo año.
En declaraciones a Europa Press, Suso Bermello (CIG-Ensino), ve «correcta» la filosofía de promoción generalizada, pero critica especialmente la demora en la que se ha adoptado esta decisión, lo que supone «un error de planificación de los tiempos».
El problema, no obstante, será el curso que viene, ha insistido, sobre todo por la carga burocrática que ha experimentado el profesorado en los últimos años.
En este sentido, ha instado a la Consellería de Educación a emitir «instrucciones muy claras» a los profesores de «hasta donde pueden llegar» y empezar a planificar la situación de cara al próximo curso, en el que será necesario «hacer un refuerzo importante».
Desde CC.OO. Ensino, José Fuentes ha aplaudido que la promoción y el aprobado esté vinculado «exclusivamente» a los contenidos que se impartieron «de forma presencial», y ha aclarado que ello no supondrá un aprobado general.
«Los que tengan materias pendientes, en la tercera evaluación lo podrán recuperar y mejorar», ha señalado, agradeciendo que se deje la repetición como algo excepcional y trabaje para «promocionar al máximo» al alumnado.
A pesar de ello, ha advertido de que «no es de recibo, a estas alturas del curso, estar así» y que la adaptación de contenidos para el próximo curso no debe suponer «un sobreesfuerzo al alumnado».
En este línea, Julio Díaz, de ANPE-Galicia, ha valorado que se evalúen los contenidos presenciales para «intentar anular esa brecha digital, con refuerzo y repaso», sin que ello suponga «café para todos».
«Con esto se acaba demostrando que la figura del profesor en el aula es insustituible. Y nos alegramos que desde la sociedad se empiecen a dar cuenta de la importancia que tenemos».
FALTA DE CLARIDAD
Fernando Lacaci, de Anpas Galegas, ha reprochado su parte la falta de claridad de los gobernantes y ha lamentado que las familias y los alumnos se quedan «igual» tras la comparecencia de la ministra Isabel Celaá.
«No nos merecemos este desastre de gobernantes», ha insistido, en alusión al Gobierno central y autonómico, puesto que «las familias no saben lo que tienen que hacer».