El aumento exponencial de infectados por coronavirus COVI-19 en Galicia «se empieza a ralentizar» en las últimas 48 horas pasado casi un mes desde el primer caso detectado en la Comunidad gallega, el pasado 4 de marzo en A Coruña. Además, las UCI de las áreas sanitarias cuentan con «bastante margen».
Así lo ha destacado, en declaraciones a Europa Press, el doctor Antón Acevedo, especialista de Medicina Preventiva del Complexo Hospitalario Universitario A Coruña (Chuac), quien ha recordado que Galicia fue la «penúltima» comunidad autónoma española a la que llegó la pandemia, con un primer caso detectado en el área coruñesa el 4 de marzo correspondiente a un hombre que había viajado desde Madrid a la ciudad herculina a una entrevista de trabajo.
Al respecto, el doctor Acevedo ha incidido en que el primer caso positivo en Galicia «fue importado» y hasta «unos pocos días después» no se detectó transmisión comunitaria, lo que, ha asegurado, «permitió preparse mejor» a la Comunidad gallega para hacer frente a la pandemia «de una forma más adecuada».
Preguntado por la evolución del número de infectados en este primer mes de crisis sanitaria en Galicia, ha explicado que inicialmente se comportó de «forma explosiva» al irse «duplicando los casos cada muy pocos días». No obstante, ha afirmado que en las «últimas 48 horas» la evolución exponencial «se está empezando a ralentizar», pero ha matizado que se debe esperar «dos o tres días» para «confirmarlo».
DATOS
De hecho, según los datos analizados por Europa Press desde la semana en la que se detectó el primer positivo en Galicia –la que concluyó el domingo 8 de marzo–, el número de casos ha pasado de multiplicarse por 15 –entre el 8 y 15 de marzo– a casi duplicarse –entre el 29 del mes pasado y este viernes 3 de abril– al transcurrir un mes del primero detectado en la Comunidad gallega.
En concreto, al término de la primera semana con casos positivos en Galicia –la que concluyó el 8 de marzo–, había 13 positivos y, al concluir la siguiente esta cifra ascendió el 15 de marzo –con el inicio del confinamiento por el estado de alarma decretado ese fin de semana– a 189 infectados, lo que supuso multiplicar por 15 los de siete días antes.
En esa semana entre el 8 y 15 de marzo, los ingresados en UCI pasaron de ninguno a ocho y se registraron los dos primeros fallecidos con coronavirus en la Comunidad gallega –el primero el 14 de marzo–.
Una semana después, el domingo 22 de marzo, los casos de infectados se habían casi quintuplicado, de los 189 del día 15 a 885 registrados por Sanidade siete jornadas después. Por su parte, los pacientes en UCI se cuadriplicaron, de 8 a 33, así como las altas, que pasaron de cuatro a 16.
Por su parte, la cifra de fallecidos en esa semana se multiplicó por siete, de dos a 14, lo que supuso 12 más en siete días, según los registros de la Consellería.
Una semana después, el domingo 29 de marzo los casos de infectados se triplicaron, de los 885 a 2.925 en siete días, lo que supone 2.040 más, así como los ingresados en UCI, que pasaron de 33 a 122, lo que implica 89 más que siete días antes.
También entre el 22 y 29 de marzo se triplicaron los pacientes en seguimiento en domicilio, de 625 a 2.096, lo que supuso 1.471 más, mientras que las altas se multiplicaron por nueve, de las 16 a 153. Los fallecimiento en ese periodo se cuadriplicaron, de 14 a 61.
Y entre el domingo 29 de marzo y este viernes, 3 de abril, pasado casi un mes, los casos casi se han duplicado –al mutiplicarse por 1,58– en esos días, de los 2.925 a 4.625, lo que supuso 1.710 infectados más.
También el incremento de pacientes en UCI ha sido menor, de 122 a 176, lo que conlleva 54 más; y el de pacientes en seguimiento en domicilio –que casi se duplica– de 2.096 a 3.589, con 1.493 más.
Por su parte, en este periodo, las altas hospitalarias en Galicia han pasado de 153 a 435, lo que supone duplicarse, con 282 más. En cuanto a la cifra de fallecidos, se ha incrementado de los 61 el domingo pasado a 149 hasta el mediodía de este viernes, lo que implica el doble, con 88 muertos con este virus más.
FALLECIDOS
Por áreas sanitarias, A Coruña concentra más del 29% de los fallecidos con COVID-19 –con 44 muertos hasta el mediodía de este viernes–; seguida de Vigo, con 31 éxitus; Ourense, con 23; Santiago, con 20; Lugo, con 12; Ferrol, con diez; y Pontevedra, con nueve. Las áreas coruñesa y viguesa con las que suman la mayoría de infectados en Galicia hasta este viernes –954 y 1.018, respectivamente–.
De estos 149 fallecidos, 111 han sido varones (74,5%) y 38, mujeres (25,5%). En cuanto a la edad, uno era menor de 40 años; seis mayores de 50; ocho tenían 60 o más años; 41 superaban los 70 años; 68 eran mayores de 80 y 24 tenían 90 años o más.
PERFIL
Al respecto, el doctor Acevedo ha explicado que el perfil de los infectados en Galicia es «muy similar» al de resto de comunidades, ya que se trata de un virus «muy ligado a comorbilidades» y que afecta más a los hombres que a mujeres.
Además, ha incidido en que afecta «mayormente a personas de edad avanzada», de «más de 65 años la mayoría», aunque «hay casos de jóvenes graves», ha matizado. También en relación a los fallecidos, ha apuntado la «brecha generacional», ya que se trata de «gente de más de 70 y 80 años».
CAPACIDAD EN LAS UCI
Preguntado sobre la situación en las UCI en Galicia, el doctor Acevedo ha comentado que «todavía hay margen para nuevos ingresos sin tener que tomar medidas más extraordinarias».
De este modo, ha manifestado que hasta la fecha, como en el caso del Chuac, se ha ampliado el número de camas UCI con las de otras unidades. «Tenemos capacidad para más», ha afirmado, para concluir que «hay bastante margen» para atender pacientes.
En cuanto a este tipo de recursos, fuentes del área de Pontevedra y O Salnés han apuntado que «en caso necesario y extremo» no descarta la posibilidad de «utilizar otros dispositivos de atención médica» en esta zona, donde se «está en posición de disponer de hasta 50 puestos de cuidados críticos en distintos especios, como unindades de reanimación, unidad de coronarias y quirófanos».
En relación a las altas hospitalarias registradas, que se han duplicado en la última semana, el doctor Acevedo ha explicado que los pacientes hospitalizados en planta tardan entre «siete y diez días» en abandonar el centro. En el caso de los tratados en UCI ha destacado que suele permanecer «más de 20 días».
EVOLUCIÓN
Para el doctor Acevedo con las medidas de confinamiento implementadas se tiende «hacia la fase de estabilización en próximos días». Así, ha considerado que «la semana que viene se debería notar en el número de nuevos infectados» y «la siguiente empezará a bajar», ha apostillado.
Preguntado por el pico, ha explicado que la «tasa de replicación del virus se ha reducido de forma bastante drástica» de 2,5 contagios por persona infectada a «1,1-1,2». «Si no ha llegado estamos muy cerca de alcanzarlo», ha subrayado, para matizar que ello será cuando esa ratio se sitúe por debajo de uno. «Estamos muy cerca de ese uno y en no mucho tiempo para poder bajar», ha concluido.