La extensión del coronavirus y los efectos para su prevención se dejan notar ya entre los ciudadanos de Ourense y afectan a farmacias, restaurantes, agencias de viaje o gimnasios, así como a los supermercados, donde se ha incrementado el consumo. El Ayuntamiento de la ciudad ya ha anunciado el cierre de todas las instalaciones municipales, de los parques infantiles y de la piscina de As Burgas.

La gente «se está volviendo bastante loca, compra de todo», relata a Europa Press una trabajadora de un céntrico supermercado de Ourense, quien, admite, ve al público «asustado» y que «no deja de hablar» del Covid-19. Esta situación se vive «desde hace tres o cuatro días» y comienza a ser insostenible: «Lo estamos pasando mal, se lo están llevando todo, preguntan por cosas y no las hay, no damos servicio y no nos dan servicio».

Conservas, leche, agua y, sobre todo, papel son los productos más demandados por los ciudadanos. Una empleada de otra tienda de alimentos relata cómo está percibiendo esta «psicosis sin justificación», ve excesivo el ‘saqueo’ de los supermercados y percibe que la gente va a comprar por «miedo».

Por su parte, las farmacias reciben estas jornadas en medio de un ambiente similar, de «preocupación», porque, como expone una dependienta de una botica situada en la urbe ourensana, desde hace un mes y medio no les «sirven ni mascarillas ni geles ni alcohol». En otro comercio, les entraron 40 mascarillas, pero «desaparecieron en dos días» tras una «avalancha» de gente entre «ayer y hoy».

El mismo panorama están experimentando los restaurantes de Ourense, que tendrán que soportar «costes importantes» con un horizonte incierto en el que deberán lidiar con un acusado descenso de clientes, de «hasta el 90%», según comenta a Europa Press un empresario que dispone de varios establecimientos en la ciudad. En otro conocido mesón de la urbe gallega «la gente ya no llama» para reservar, sino para «anulaciones», explica un empleado.

Las agencias de viaje apuntan que ahora tienen «el doble de trabajo», porque deberán «anular y reembolsar» las ventas, expresa el responsable de una de ellas.

Por si fuera poco, debido a la «incertidumbre», esta situación también afecta a meses donde todavía no se sabe si seguirá en pie la pandemia del coronavirus: «Nadie piensa en las vacaciones ni en viajes de ocio». En el caso particular de esta empresa, ahora mismo está facturando entre el 0 y el 3% de un mes de marzo habitual.

En otra agencia constatan ya pérdidas por valor «del 100%» porque «no se está contratando nada, todo está cancelado». Una de sus encargadas cuenta que están «tranquilizando a la gente»: «Los grupos escolares han cancelado todo hasta mayo-junio y estamos esperando a ver qué pasa con Semana Santa», ha reconocido.

Otro negocio altamente afectado por esta crisis es el de los gimnasios, a los que, desde hace unos días, «acude bastante menos gente»: ha caído hasta un «80%» el número de usuarios e incluso hay vecinos que se están dando de baja por lo que pueda pasar en las próximas semanas, según esgrime un trabajador de uno de ellos. En otro recinto, sin embargo, aunque sí se ha notado una limitación de público, no se ha efectuado por el momento ninguna baja.

CIERRE DE INSTALACIONES Y PISCINA TERMAL

El Ayuntamiento de Ourense ha ratificado este viernes la batería de medidas que tomarán para hacerle frente al contagio por coronavirus, entre ellas, el cierre de todas sus instalaciones municipales y de la piscina termal de As Burgas.

El Consistorio cancela, así, las actividades lúdicas y culturales del Auditorio, de la Sala Valente y del Museo Municipal; las formativas y deportivas –también las de las escuelas municipales–; las musicales y teatrales; los cursos de la Universidade Popular y del Parque de Montealegre; los centros cívicos, las bibliotecas, las asociaciones vecinales, las UNIS (Unidad Interdisciplinar de Intervención Social) y el Espazo Lusquiños, entre otros puntos.

De la misma forma, tampoco se podrá acceder al Pabellón de Os Remedios y demás polideportivos locales. La piscina de As Burgas y el servicio termal de los márgenes del río Miño también estarán inoperativos.

Ourense ha suspendido igualmente todo lo relacionado con el mercado ambulante del Parque del Barbaña de los días 7,17 y 26, y las ferias del 7 y 17, así como las Fiestas de San Lázaro.

El servicio municipal de autobuses mantiene su línea regular, aunque fuentes de Urbanos de Ourense ya han confirmado al Ayuntamiento que «se están haciendo continua e intensivamente tareas de desinfección» en sus vehículos «con productos específicos», centrándose «en todas aquellas superficies de contacto».

La actividad administrativa sí continuará en pie, pero las concejalías suspenden el régimen de visitas y la Casa do Concello limita a 15 personas su aforo. Las solicitudes de certificados, altas de padrón o cambios de domicilio únicamente se podrán solicitar por correo electrónico (padron@ourense.es) o en el teléfono de información 988 388 111.

La Oficina de Atención Cidadá solamente atenderá quejas, consultas y peticiones de citas vía telefónica (988 392 909) y a través de la Carpeta Cidadá alojada en Internet. La Oficina Municipal de Turismo y el Consello Municipal de Deportes prestarán servicio a través del teléfono o del correo.

Por su parte, el Rexistro solo aceptará la documentación en papel de personas físicas, no de personas jurídicas, profesiones colegiadas y entidades sin personalidad jurídica (comunidades de propietarios, asociaciones de vecinos, etc.), que tendrán que presentarla por medios telemáticos. Los matrimonios civiles se desarrollarán a puerta cerrada.

QUE SE UTILICEN LOS TELÉFONOS

Con todo, desde el Ayuntamiento piden que «la gente utilice los teléfonos» ya disponibles para solucionar cualquier duda antes de acudir personalmente a estos lugares –la página web del Ayuntamiento (www.ourense.gal) alberga todos los contactos–.

A los trabajadores municipales se les dotará de material desinfectante así como de «jabones especiales» y se les buscarán «medidas de flexibilidad para poder conciliar» su vida laboral y personal tras la suspensión de la actividad escolar, efectiva a partir del próximo lunes.

La empresa suministradora de agua Viaqua también cierra sus oficinas de atención al público y pondrá carteles en las puertas con unos números de teléfono habilitados para solucionar las dudas vía teléfono.