La Plataforma vecinal Mina Touro-O Pino Non ha lamentado este jueves «enterarse» por la Unión Europea (UE), en concreto por la presidenta de la Comisión de Peticiones, Dolors Montserrat, de la carta de la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, le remitió «con motivo de la declaración de impacto ambiental negativa» de la mina de Touro, en la que «adelanta» que ésta se publicará en el Diario Oficial de Galicia (DOG) este viernes 7 de febrero.
La comunicación, según explica en un comunicado, se produjo en la pasada jornada y llegó tanto a la plataforma como a las asociaciones Cova Crea y Petón do Lobo, basadas fundamentalmente «en el daño provocado en las aguas subterráneas y superficiales, y el riesgo que conllevaría una nueva explotación en unos terrenos aún sin restaurar».
Las tres peticiones inscritas y debatidas en la Comisión de Peticiones en noviembre de 2019 permanecen actualmente abiertas y a la espera de la visita de una delegación europea que analice y evalúe ‘in situ’ los daños al medio ambiente causados por la explotación minera cerrada hace más de 30 años y por las actividades desarrolladas en la actualidad por las empresas ubicadas dentro de los terrenos de la antigua mina.
De hecho, la plataforma ha advertido que no solo solicitará que se mantenga abierta la petición, sino que insistirá «en la necesidad de una visita de inspección europea a Touro y a otras minas gallegas donde se evidencia la vulneración sistemática de las directivas» europeas.
«El carpetazo al proyecto de Cobre San Rafael no supone, de ninguna forma, bajar la guardia ante la situación de dejadez de los últimos años respecto a los daños provocados por la minería en Touro. La exigencia de la restauración de los terrenos y la recuperación de las aguas del entorno de la mina seguirá estando vigente hasta su total cumplimiento», ha avisado.
«RAPIDEZ INTERESADA»
Por otra parte, la portavoz del BNG en Europa, Ana Miranda, ha criticado la actuación del Gobierno gallego, en relación a la carta remitida para «tratar de que cierre una petición» referida a la investigación sobre la mina de Touro, decisión que «debe ser tomada por los diferentes grupos políticos que integran la Comisión».
A su juicio, según apunta en un comunicado, esta «rapidez interesada» responde al «miedo» que tiene el Ejecutivo autonómico a que el Parlamento europeo «investigue la megaminería en Galicia y sus consecuencias».
Al respecto, ha anticipado que el Grupo Verdes-Ale, en el que está el BNG, impedirá que la petición sobre la mina de Touro se cierre, como «medida de cautela y observación» de las actuaciones que se desarrollen en el futuro en este territorio.
«Resulta muy curioso la tardanza del Gobierno gallego en el envío de los informes correspondientes a la mina de San Finx y la prisa que tuvieron en este caso; debe ser que tienen bastante que ocultar», ha apuntado.