El delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, ha asegurado a la familia de Diego Bello, el coruñés que falleció en un tiroteo en una operación antidroga en Filipinas, que se están agilizando los trámites para que la repatriación «se realice esta semana».
Además, ha confirmado que se está recabando información para esclarecer los hechos, después de que la policía filipina vinculase al joven con el tráfico de estupefacientes, algo que tanto la familia como sus amigos han rechazado.
Así lo informa la Delegación del Gobierno a través de su cuenta de Twitter, en la que traslada también el «pésame y el apoyo» a la familia de Diego Bello.
Por su parte, su hermano, Bruno Bello, presente en la reunión celebrada con el delegado del Gobierno, ha confirmado a Europa Press que se les transmitió «tranquilidad» en cuanto a la repatriación del cadáver.
«Los papeles que se necesitaban ya están en Manila y ahora empiezan los trámites internacionales», ha expuesto sobre los pasos a a seguir para que el cuerpo de Diego Bello se pueda trasladar de Filipinas a España.
Por otra parte, ha confirmado que se está llevando a cabo una investigación «en la más estricta confidencialidad», después de que, además, se le realizase al cuerpo una autopsia encargada por la Comisión de Derechos Humanos de Filipinas.
La muerte de Diego Bello se produjo el pasado 8 de enero en una operación en su domicilio en la localidad de General Luna, en Siargao. La Policía, que lo consideraba sospechoso de tráfico de cocaína, lo mató en un tiroteo registrado en el sur del archipiélago filipino, según informó el diario digital local Minda News.