La cobertura vacunal se sitúa como el principal freno a la reaparición de enfermedades como el sarampión o las paperas. Si bien expertos sanitarios destacan que Galicia se encuentra entre las regiones nacionales con las coberturas «más elevadas», inciden en la importancia de recibir las vacunas.

En declaraciones a Europa Press, la jefa del Servicio de Medicina Preventiva del Complexo Hospitalario Universitario A Coruña (Chuac), María José Pereira, ha apuntado la «baja cobertura» en vacunación como el «grueso de la causa» de la ola epidémica de sarampión en Europa, que no afecta a España precisamente por la alta cobertura vacunal, según ha comentado.

En cuanto a los brotes de paperas, la doctora Pereira ha explicado que «afectan cada cuatro o cinco años a países con buenas coberturas vacunales como España». Al respecto, ha puntualizado que la vacuna triple vírica que protege frente a esta y otras enfermedades «puede dejar de ser efectiva al pasar 15-20 años».

Sobre la situación concreta en Galicia, la doctora Pereira ha señalado que esta comunidad «representa bien lo que pasa», ya que no registra casos de sarampión y «sí cíclicamente de paperas» dentro de lo que «se podía esperar», ha puntualizado.

Por ello, ha insistido en la importancia de la vacunación, al tiempo que ha destacado que Galicia se sitúa entre las comunidades con las tasas «más elevadas» por encima del 95% en la primera dosis de la triple vírica y algo por debajo de ese dato en lo que respecta a la segunda.

De este modo, ha afirmado que Galicia se ha quedado fuera del brote reciente de sarampión al contar con una cobertura de un 95 por ciento, ya que la «única forma» de controlar la presencia de esta patología «es la vacunación», sostiene la jefa de Medicina Preventiva del Chuac.

BROTES

«La cobertura importante vacunal hará que los casos se vean limitados», ha insistido, para apuntar la posibilidad de «pequeños brotes cada 4-5 años». «Si se deja de vacunar, volverán estas enfermedades habituales en la infancia», ha advertido.

En concreto, según los datos facilitados, la cobertura vacunal de la primera dosis de la triple vírica en 2018 en Galicia se situaba en el 97,3%, frente al 90,5% en España; mientras que de la segunda dosis en la Comunidad gallega estaba en el 92,6%, frente al 89,3% de la media nacional.

EDUCAR E INFORMAR

Al respecto, el jefe de Pediatría del Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) y experto en vacunas, Federico Martinón, ha subrayado, en declaraciones a Europa Press, que las coberturas en Galicia y en España «son muy buenas», pero «hay que huir de la autocomplacencia y estar vigilantes».

En este sentido, Federico Martinón ha incidido en la importancia de «educar e informar» para combatir el «sentimiento de duda por miedo a lo desconocido» que lleva a personas a «desconfiar» de las vacunas. Así, ha criticado la «desinformación» de los antivacunas y que se acuda «al doctor Google».

De este modo, Martinón ha afirmado que la situación en Galicia «es buena» y «está bajo control», pero ha apostado por «no dormirse en los laureles» para «mantener la cobertura» vacunal.

«Tenemos las enfermedades bajo control, pero cuando dejamos de vacunar vuelven», ha advertido el doctor Martinón, que ha explicado que retornan primero «las más contagiosas», lo que ha motivado la ola epidémica de sarampión que afecta a varios países europeos. Por ello, ha insistido en que frenarlas «exige una cobertura vacunal más elevada» y se deben «tomar medidas».

Lo más inmediato, para el doctor Martinón es la «información y la educación» desde la infancia. Así, por una parte defiende «inculcar los valores que tiene la vacunación» para que «sepan los peligros a los que se exponen» si no se reciben las dosis recogidas en el calendario vacunal.

Al hilo de ello, ha remarcado que si bien los niños en la actualidad «son conscientes de la importancia del reciclaje y la ecología sostenible», también deben serlo del «bien general que suponen las vacunas» para la protección de la «salud colectiva del entorno en el que viven», ha matizado.

También ha reivindicado la importancia de la educación en el ámbito profesional y ha apelado a que las autoridades sanitarias «no deben consentir que los profesionales sanitarios sean promotores del sentimiento antivacunas» porque, a su juicio, «es un profesional no capacitado para ejercer» y «no se debe permitir».

De este modo, el doctor Martinón considera que en el campo de las vacunas las autoridades sanitarias «deberían tener medidas más enérgicas» frente a estos profesionales «antivacunas».

Asimismo, ha destacado que las vacunas «no son solo una cosa de niños», por lo que aboga por «pensar como un calendario a lo largo de toda la vida», que «empieza en el embarazo». Así, ha reiterado que en la concienciación «influye una buena educación e información». «Vamos mejorando y hay que seguir trabajando», ha sentenciado el doctor Martinón, para advertir de que «las enfermedades afectan también a otras edades de la vida, no sólo a los niños».

DATOS

Según los datos publicados por la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica, recogidos por Europa Press, en el primer trimestre de 2019 se registraron seis casos de paperas en Galicia y fueron notificados tres de sospechas de sarampión.

En concreto, el último informe epidemiológico publicado por la Dirección Xeral de Saúde Pública con respecto a la situación de la parotiditis en Galicia –correspondiente a diciembre de 2019–, que se vigila en la comunidad desde 1982, año en el comenzó la vacunación frente a ella, refleja que en «las últimas cuatrisemanas de 2019 la notificación de casos» de paperas –hasta el 1 de diciembre– «creció en Galicia» respecto de lo observado desde que terminó el último brote.

«El aumento afecta sobre todo a los que tienen entre 15 y 24 años», se destaca en el informe, que puntualiza que también se observaron aumentos en otros grupos de edad, como en el de 25 a 29 años.

En cuanto al sarampión, la doctora Pereira ha ratificado a Europa Press que la última situación de riesgo en la Comunidad gallega ha sido en las provincias de Ourense y Lugo, con tres casos afectados, en el año 2019.

Por su parte, los datos de la Rede Galega de Vixilancia en Saúde Pública publicados en la web del Sergas, recogidos por Europa Press, reflejan que desde que en 2013 se registró un caso de sarampión no se contabilizó otro hasta 2018. En los últimos diez años el ejercicio con más detectados ha sido 2011 con un total de siete, correspondientes a un brote en la provincia de Lugo con un caso índice importado y seis autóctonos.

En lo que se refiere a las paperas, este registro constata un repunte de casos en 2013, con 3.335, cifra que cayó a 587 en 2014 y a 421 en 2015. Mientras, en 2016 hubo un ligero repunte en el número de casos (505), tras lo que se redujeron a 487 en 2017 y a 391 en 2018.