The Ritz-Carlton Yacht Collection, a través de Cruise Yacht Upper Holdco Limited (CYUHL), ha anunciado que ha alcanzado un acuerdo con CESCE y la banca para «completar la reestructuración general» de Hijos de J. Barreras. También ha avanzado que asumirá el sobrecoste del crucero que se construye en el astillero vigués, además de asegurar un segundo buque.
Mediante un comunicado, The Ritz-Carlton ha señalado su «claro compromiso» con la asunción del sobrecoste del ‘Evrima’ para atajar la situación económica del astillero y ha avanzado la próxima renaudación de la producción. Así, ha detallado que ya se ha trasladado a todas las partes este anuncio y ha apuntado que la validez del contrato se ha extendido a un buque hermano del crucero de lujo firmado en mayo de este año.
En concreto, la empresa ha indicado que el proceso de reestructuración general del astillero se ajustará a las necesidades expresadas por Barreras. Así, se realizarán nombramientos temporales de equipos «externos y experimentados» que trabajarán para garantizar su continuidad.
En la misma línea, ha precisado que los nuevos equipos buscarán la finalización del ‘Evrima’ y otros contratos «viables», además de captar nuevos negocios «rentables» en el futuro.
COLABORACIÓN
Adicionalmente, el CEO de Cruise Yacht Upper Holdco Limited, Douglas Prothero, ha valorado el acuerdo alcanzado con CESCE y la banca. Así, ha destacado su colaboración, así como la de PEMEX y el grupo Albacora, propietarios del 75 por ciento de las acciones del astillero, con los que llegó a un acuerdo a principios de este mes para tomar el control de Barreras.
Asimismo, CESCE ha recordado que ha trabajado con las distintas partes implicadas para encontrar una solución viable a la situación del astillero. Sin embargo, ha asegurado que la «única» que ha presentado una propuesta plausible para reiniciar la producción del astillero ha sido The Ritz-Carlton y ha avanzado que seguirá trabajando junto a esta empresa.
Este anuncio se realiza después de que la dirección del astillero vigués Barreras comunicase a sus empleados que no acudiesen a trabajar en el período entre el 23 de diciembre y el 7 de enero, con cargo al «exceso» de horas.
Mientras, la Xunta había manifestado la «imposibilidad» de acceder a la ayuda millonaria y «a fondo perdido» que The Ritz-Carlton había solicitado para terminar su crucero y había apuntado que la solución a la situación de Barreras debía conllevar una respuesta «integral» al conjunto de la carga de trabajo.