El BNG y el PSdeG han remarcado que el cese de tres altos cargos de la Consellería do Medio Rural confirma el «fracaso» y el «desastre» de la gestión del departamento autonómico en la ola de incendios del pasado verano y han apuntado a la conselleira, María José Gómez, «la máxima responsable».
Tras anunciar este lunes el presidente Alfonso Rueda los ceses, el BNG ha señalado que muestran la «errónea y negativa» política del Gobierno gallego en relación con la ordenación del territorio, con la producción agroforestal y con la defensa del medio rural frente a los incendios.
En esta línea, el portavoz del área del Bloque, Secundino Fernández, ha afirmado que este «cambio de caras de segundo nivel» es «insuficiente» para cambiar las políticas destinadas al rural, ya que «evitan de momento a la máxima responsable» de la Consellería, María José Gómez, a quien ha acusado de adoptar políticas que «llevaron al desastre» en la gestión de los incendios del pasado verano.
Para Fernández, los cambios en las direcciones generales de Defensa do Monte, Planificación e Ordenación Forestal y en la Secretaría Xeral de la Consellería representan «las primeras víctimas políticas de la desastrosa gestión» de los incendios más grandes de la historia de Galicia.
En este contexto, ha recordado que el BNG propone un cambio «profundo» en las políticas en este ámbito y ha insistido en que «no llega con cambiar ciertas caras de segundo nivel», sino que deben cambiar «los responsables, comenzando por la conselleira».
PSDEG: «RESPONSABILIDAD DIRECTA» DE LA CONSELLEIRA
Por su parte, el PSdeG ha trasladado que los ceses anunciados este lunes confirman el «desastre» de la gestión de la conselleira, marcada, en su opinión, «por la falta de planificación, el desorden y la improvisación permanente» con responsabilidad directa también «del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda».
La portavoz socialista de política forestal, Carmen Dacosta, ha recordado que las hectáreas calcinadas el pasado verano evidencian «el fracaso de las políticas de prevención y de gestión forestal impulsadas por la Xunta».
Además, ha subrayado que a día de hoy «el Pladiga sigue sin publicarse» cuando se trata, ha añadido, «de un instrumento básico para la planificación y la prevención de incendios».
Por eso, ha manifestado que los ceses anunciados «no son ninguna sorpresa», sino que «confirman que algo se hizo mal y que las advertencias» de los socialistas «estaban más que justificadas».
Sin embargo, ha lamentado que «llegan tarde» y que «no afrontan el problema de fondo»: «Una conselleira sin rumbo, avalada por un presidente que mira para otro lado».

