El PPdeG ha tumbado en el Parlamento de Galicia las tres mociones defendidas por la oposición en relación con cuestiones como financiación municipal, eólicos y Altri.
Por un lado, Óscar Ínsua (BNG) ha denunciado la «infrafinanciación» de los ayuntamientos gallegos y critica la falta de apoyo de la Xunta mientras suman más «cargas y tareas». Alerta de que «el 75%» de los fondos municipales se reparten de forma discrecional, según dice. La iniciativa pedía aumentar el apoyo a ayuntamientos, especialmente en materias como el servicio de atención a domicilio (SAF).
Recrimina que la Xunta «incumple» el compromiso de que el Consello apruebe antes de terminar el año el anteproyecto de la ley de administración local y pide «celeridad».
Al respecto, la diputada popular Paula Prado ha descartado apoyar esta propuesta y ha remarcado que está previsto tramitar la nueva ley de administración local a lo largo de 2026.
«ACOSO» AL TSXG
Por otra parte, Luís Bará (BNG) ha arremetido con lo que define como «campaña de acoso, intimidación y presión» contra el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) por su paralización de proyectos eólicos, según sostiene, «dirigida por la presidencia de la Xunta», así como «coordinada por la Consellera de Medio Ambiente y que está ejecutada por la patronal eólica y otros secuaces».
La iniciativa del Bloque, rechazada por el PP, emplazaba a la Xunta a «cesar en los ataques» al TSXG y pedía instrumentos de protección ambiental.
En respuesta, Gonzalo Trenor (PP) ha reprochado a los nacionalistas que «hablen de acoso» cuando «siguen ustedes formando parte de un gobierno de acosador sexual», en referencia a la Diputación de Lugo.
Finalmente, Patricia Iglesias (PSOE) ha defendido una propuesta en la que pedía a la Xunta dictar una resolución administrativo denegatorio del proyecto industrial de Altri en Palas de Rei, «motivada en el incumplimiento de los requisitos de sostenibilidad ambiental, económica, técnica y social».
Iglesias reprocha a la Xunta la «propaganda» de los proyectos industriales estratégicos, que luego «no ejecutan». También ha criticado el papel de la extinta sociedad Impulsa y su acuerdo «secreto» con Altri.
Enfrente, Rubén Lorenzo (PP) ha negado «parálisis» de proyectos industriales estratégicos y ha dicho que el PSOE pide «prevaricar» con esta propuesta.

