SATSE-FSES, FSS-CCOO, UGT, CSIF y CIG-Saúde, las organizaciones sindicales con representación en el Ámbito de Negociación, afirman que el Ministerio de Sanidad y las CCAA han pactado un borrador del nuevo Estatuto Marco del personal estatutario que supone un «retroceso histórico» y, pese a no haber finalizado aún el encuentro, fuentes cercanas a la negociación han señalado que se preparan para una «gran manifestación» el 1 de octubre frente al ministerio, con delegados de toda España.
El encuentro, que daba comienzo a las 10.30 de la mañana, daba respuesta a la petición de los sindicatos de reunirse antes de la celebración del Foro Marco del Diálogo Social con las comunidades autónomas, para conocer los cambios concretos. Solo una hora después del inicio de la reunión, los sindicatos han comunicado su descontento porque consideran que el texto del nuevo Estatuto Marco, tras las últimas modificaciones introducidas por las Comunidades Autónomas, se ha «desvirtuado» y ha «perdido fuerza normativa».
Fuentes del CSIF consultadas por Europa Press, afirman que no se han levantado de la reunión con el ministerio por «respeto» pero su posición es clara: «En lugar de avanzar hacia un marco común para el millón de profesionales de la sanidad pública, las modificaciones pactadas con las Comunidades Autónomas suponen un retroceso histórico: se abre la puerta a que cada autonomía regule de forma unilateral aspectos esenciales de las relaciones laborales, limitando incluso el papel de las propias mesas sectoriales autonómicas».
A su juicio, según señalan en un comunicado, es «inaceptable» que, «en un momento marcado por la escasez de personal, la sobrecarga asistencial y la precariedad, el Ministerio de Sanidad renuncie a liderar e impulsar una norma básica que establezca mínimos comunes y derechos homogéneos en todo el Estado».
A juicio de las Organizaciones presentes en el Ámbito, con su redacción actual, el Estatuto Marco «se convierte en una mera declaración sin fuerza normativa, sin garantías de negociación real y sin capacidad para mejorar las condiciones de trabajo».
«No se puede perder esta oportunidad histórica para dotar al Sistema Nacional de Salud de un marco sólido, estable y negociado, que garantice la igualdad de derechos laborales de todas y todos los profesionales, con independencia de la comunidad autónoma en la que trabajen», se lamentan.