El embajador de Palestina en España, Husni Abdel Wahed, ha asegurado este viernes en el municipio coruñés de Oleiros que «nadie puede sentirse ni lejano ni ajeno» a lo que está ocurriendo con el pueblo palestino.
Así lo ha señalado en un acto público en el Centro Cultural A Fábrica, donde ha remarcado que confía en que el pueblo palestino «en algún momento gozará de los valores humanos de justicia, libertad, paz y vida».
«Lo único que quieren es demostrar que no hay otra cosa que no sea Israel», ha asegurado, al tiempo que ha recordado que, «durante mucho tiempo», en Palestina el ejército israelí «arrancaba, talaba y quemaba» los olivares.
«Curiosamente, en el mismo lugar donde talaban y quemaban los olivares, plantaban nuevos olivos. ¿Cuál es el mensaje? Que todo lo anterior no cuenta, que todo comienza con Israel», ha esgrimido el embajador de Palestina en España.
A renglón seguido, ha lamentado que «todos los centros culturales» de la Franja de Gaza «fueron destruidos», «todas las bibliotecas y las universidades».
Con ello, lo que busca el ejercito israelí es «sumir en la ignorancia» a la población, porque así «no podrán afrontar a la ocupación» ya que la preocupación sería «conseguir un plato de comida».
«En la franja de Gaza se usa el hambre como arma de guerra y aquellos hambrientos cuando van a buscar un plato de comida son asesinados. Mientras esperan en las filas para recibir ayuda, son asesinados», ha subrayado.
«ME ACUERDO DE NUESTROS NIÑOS»
También ha explicado que durante esta jornada realizó un recorrido por el municipio y vio a los niños jugando y disfrutando de su infancia en una ambiente «realmente envidiable».
«Me acuerdo de nuestros niños», ha continuado, al tiempo que ha lamentado que «fueron privados de su derecho a la educación, a la infancia y a la vida».
«Aún hay quien entra en polémicas y debates si lo que ocurre en Palestina es una masacre, un genocidio y, la verdad, es que no importa cómo se haga. Lo importante es la sensibilidad humana», ha afirmado.
«Ya se normalizó la ocupación de Palestina», ha dicho, a la vez que ha sostenido que «nadie puede sentirse ni lejano ni ajeno a lo que ocurre en Palestina».