El conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, ha asegurado que el cierre del servicio de paritorio del Hospital comarcal de Verín, en Ourense, es una decisión «difícil» pero «responsable», en la que prima «la seguridad» de los niños y niñas y de las madres.
Así se ha pronunciado el titular de Sanidade este miércoles en respuesta a una interpelación y dos preguntas formuladas por Común da Esquerda, PSdeG y el Grupo Mixto, quienes han cargado contra la supresión del servicio, que atribuyen a una «decisión política», y han avisado de futuros recortes en otros hospitales comarcales.
«Priorizamos la seguridad de las madres y de los neonatos sobre las críticas que estamos recibiendo», ha asegurado el conselleiro, que se ha referido al descenso de la natalidad en la comarca de Monterrei. «Pasó de los 147 partos en 2010 a unos 60 este año, lo que supone una disminución de casi el 60%», ha indicado.
A ello, ha añadido que, los partos, en la actualidad, son «más complejos», debido a causas como la «mayor edad de las madres y las gestaciones múltiples», entre otras. «Es un proceso natural pero no carente de riesgos», ha manifestado.
En su discurso, también se ha referido a la «escasez» de pediatras que afecta al conjunto del Sistema Nacional de Salud y ha recordado que, en el caso del Hospital de Verín, quedaron sin cubrir dos interinidades al no presentarse ningún aspirante.
Además, ha atribuido al gobierno bipartito que este centro carezca de servicio de Pediatría desde «2006» y ha señalado que «el único pediatra» –de Atención Primaria– que realizaba guardias en el hospital comarcal «dejó de hacerlas por razones de edad».
«RESPALDO DE LOS PROFESIONALES»
Con estos datos y «contando con el respaldo» de 44 ginecólogos y obstetras del área sanitaria, sociedades científicas, del Colegio Médico de Ourense, ha asegurado que se decidió trasladar únicamente el acto del parto al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO).
«Preferimos tomar esta decisión antes de que tengamos que lamentar consecuencias irreversibles para una mujer y para su bebé», ha argumentado en un pleno en el que ha considerado que «los mismos que ahora cuestionan una decisión basada en informes técnicos» criticarían a la Xunta «si no tomase esta decisión».
CRÍTICAS EN BLOQUE DE LA OPOSICIÓN
Enfrente, la diputada del Grupo Común da Esquerda, Eva Solla, ha aprovechado su interpelación al titular de Sanidade para exigir su «dimisión» por demostrar que «su palabra no vale nada».
Así, ha recordado que el conselleiro «dijo que no iban a sustituir pediatras en la provincia de Ourense porque no había, pero que estaban haciendo un esfuerzo para buscarlos». «Dos semanas después cerraron ese servicio y el paritorio de Verín», ha denunciado.
Por su parte, el socialista Julio Torrado ha denunciado la existencia de «un recorte de servicios programado y sistemático» en los hospitales comarcales que, en su opinión, «tiene su fundamento únicamente en un criterio, el dinero». «No hay ningún otro criterio técnico que lo motive», ha indicado.
Además, ha vuelto a censurar que la Xunta acuda a la «política del miedo» para justificar su decisión y llegue a afirmar que los profesionales pueden perder «pericia». «Ese desprecio llevó a más de 20.000 personas a la calle el pasado sábado», ha indicado.
Por su parte, la diputada del Grupo Mixto Paula Vázquez Verao ha asegurado que hay «un clamor» en contra de la decisión de Sanidade y ha criticado que sea «más fácil» cargar la decisión sobre «las mujeres» que «gestionar bien» los servicios.
TIEMPOS DE ESPERA
En el pleno, el titular de Sanidade ha dado respuesta a otra pregunta formulada por el diputado de PP Aurelio Núñez Centeno sobre las listas de espera en el Sergas. Al respecto, Vázquez Almuiña, ha destacado que unos 85.200 pacientes se beneficiaron del decreto de garantías de tiempos máximos de acceso a las prestaciones sanitarias públicas desde su entrada en vigor en enero de 2018.
El titular de Sanidade ha desgranado estos datos en respuesta a Aurelio Núñez Centeno, quien ha aprovechado su intervención para acusar a los grupos de la oposición de «mezclar y confundir» las cifras de espera, cuando son las «mejores de la serie histórica».
«Parece que todo sirve para conseguir votos», ha censurado para instar al Grupo Mixto, BNG, PSdeG, y Común da Esquerda a pedir también disculpas por sus «insultos» a los cargos que fueron investigados por el subministro de fármacos de la Hepatitis C después de que se archivase la causa.
En su intervención, el conselleiro ha asegurado que desde la puesta en marcha del decreto de tiempos máximos hasta el 28 de noviembre se realizaron «20.944 intervenciones quirúrgicas de diagnósticos garantizados», «32.327 consultas de vías rápidas y cáncer» y «31.929 pruebas diagnósticas de vías rápidas de cáncer».
Almuiña, que ha asegurado que «toda esta actividad se realizó con recursos propios» del Sergas, ha recordado que esta norma marca un plazo máximo de espera de 60 días naturales para las intervenciones quirúrgicas programadas y no urgentes en el caso de los cánceres, patología severa de las válvulas cardíacas, aneurismas cerebrales, obstrucciones arteriales graves, desprendimiento de retina e hidrocefalia.
Asimismo, ha indicado que establece un plazo máximo de espera de 45 días naturales para las primeras consultas externas hospitalarias programadas y no urgentes de las vías rápidas de cáncer; y un plazo máximo de espera también de 45 días para las primeras pruebas diagnósticas y/o terapéuticas programas y no urgentes relacionadas con las vías rápidas de cáncer.