La Fiscalía ha rebajado a tres años de cárcel la petición de condena a cada uno de los dos hombres acusados de vender drogas a estudiantes menores de edad en A Pobra do Caramiñal (A Coruña), entre septiembre de 2020 y febrero de 2021, una reducción que se debe a la consideración de que hay dos atenuantes que benefician a los procesados.
Antes del juicio, que se ha celebrado en la sección sexta de la Audiencia de A Coruña, en Santiago de Compostela, el Ministerio Público había solicitado que los dos imputados fuesen condenados, cada uno, a seis años y medio de cárcel por delitos contra la salud pública, y también imponerles una multa de 4.000 euros.
Asimismo, la acusación mantiene que ambos acusados, además de vender drogas, «obligaban y coaccionaban» a un menor para que participara en las operaciones de venta, llegando a decirle que «le pegarían o que harían daño a su familia» si no colaboraba.
Sin embargo, al final del juicio, la Fiscalía ha modificado su solicitud de pena a tres años tras considerar que los acusados han declarado ser, en la época, toxicómanos y que también se produjo una «dilación indebida del proceso», o sea, un retraso irregular en el procedimiento de volcado de los móviles de los imputados.
DECLARACIONES
Uno de los procesados ha admitido ante el juez que en la época, entre septiembre de 2020 y febrero de 2021, se dedicaba a la venta de drogas. Sin embargo, ha negado la acusación de haber dado estupefacientes a menores en institutos y ha rechazado haber obligado y coaccionado al adolescente, que según la Fiscalía servía de enlace con los demás jóvenes.
A pesar de esto, el acusado ha manifestado su conformidad con la petición de la Fiscalía de tres años de prisión, mientras que el segundo imputado, a través de su defensa, ha rechazado la petición y por lo tanto mantiene la solicitud de su absolución.
Además de los dos procesados, este miércoles también han declarado testigos y agentes de la Guardia Civil que investigaron el caso. Uno de los testigos ha sido el joven que, en la época de los hechos, era menor de edad y que denunció en Comisaría, acompañado de su madre, haber sufrido amenazas y agresiones.
Este testigo ha afirmado durante el juicio que no se acordaba de muchos hechos relatados por la Fiscalía y ha expresado su deseo de retirar la denuncia, a lo que el juez le recordó que esa decisión no dependía de su voluntad.