El Consello de la Xunta ha dado luz verde este lunes a la declaración como «proyecto industrial estratégico» (PIE) de la ampliación de la planta de Urovesa en la localidad pontevedresa de Valga.
Así lo ha explicado el presidente gallego, Alfonso Rueda, en la comparecencia posterior a la reunión semanal de su Gobierno, en la que ha detallado que esta declaración viene en un momento «muy oportuno, visto el actual contexto internacional».
La ampliación, ha señalado, supone una inversión por parte de la empresa de 52 millones de euros, que contará con 100.000 metros cuadrados a mayores, «destinados a la fabricación básicamente de todoterrenos», concretamente de vehículos para uso militar y también para emergencias, por ejemplo vehículos antiincendios.
En concreto, las instalaciones constarán de una nave de dos plantas dividida en varias áreas que van a incluir, entre otras cosas, un almacén robotizado, zonas de pintura, montaje y pre-montaje, una pista de pruebas, una escuela de pilotos y un centro de visitantes-museo con el que se busca «preservar y difundir la trayectoria de la empresa».
Según ha señalado, la previsión es crear «no menos de un centenar de puestos de trabajo directos», además de los que pueda haber de forma indirecta, y ha indicado que la previsión es que la nueva ampliación esté a operativa, «como muy tarde», en el año 2029.
Actualmente Urovesa dispone de 12.000 metros cuadrados en el polígono de Tambre, en Santiago de Compostela, para actividades de apoyo post venta, con talleres de reparación, almacén de recambios y oficinas administrativas.
En Valga, cuenta con una superficie de 39.000 metros cuadrados con zonas de pintura, almacén y oficinas administrativas. Ahora, con la ampliación, podrá acometer proyectos de series más largas o de productos de mayor dimensión.
Con todo, la Xunta ha recordado en una nota de prensa que URO, Vehículos Especiales S.A., es una empresa proveedora de las Fuerzas Armadas de España desde 1984 que en la actualidad trabaja en 30 países.
Asimismo, ha indicado que se trata de una empresa de capital 100 % privado y nacional, y no fabrica bajo licencia, sino que diseña senón su propio producto, «lo que le confiere una independencia total en cuanto a la propiedad intelectual así como de los componentes relevantes».