Decenas de trabajadores del servicio de limpieza de los hospitales Clínico y Gil Casares de Santiago se han concentrado este viernes ante la Consellería de Sanidade, en San Lázaro, para pedir la rescisión del contrato a Ilunion, UTE concesionaria del servicio, por sus «reiterados incumplimientos».
Según informa la CIG, durante la protesta, el comité ha registrado un escrito dirigido al conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, para reclamarle, igual que hizo directamente con la Xerencia del CHUS, que finalice con su vínculo porque infringe la ley de contratos del sector público.
Tal y como ha explicado Anxo Noceda, representante del sindicato nacionalista, los «reiterados incumplimientos» tienen que ver con la falta de cobertura de vacantes y el exceso de carga de trabajo, principalmente.
Además, Noceda ha denunciado que este mismo viernes el comité conoció «un nuevo incumplimiento», ya que la empresa «comunicó la negativa a aplicar la subida salarial del 0,5 por ciento para el personal público», algo a lo que los trabajadores de las contratas del Sergas «también tienen derecho».
Por todo ello, ha exigido una actuación urgente de la Administración gallega y ha avanzado que, si no se adoptan medidas, el personal intensificará sus protestas en próximas semanas.