Medio centenar de agentes y funcionarios de la Comisaría de Vigo-Redondela, convocados por los sindicatos policiales CEP, SUP y Jupol (y con apoyo de CC.OO. y CSIF), se han concentrado este martes a las puertas de las dependencias para denunciar las «condiciones extremas» en las que tiene que trabajar, y que también afectan a los ciudadanos, por temperaturas que, en este verano, superan los 33 grados.
Así, el responsable de comunicación de la CEP, José Javier Martínez, ha denunciado que el sistema de climatización de la Comisaría viguesa, inaugurada en 2013, está «averiado», y las temperaturas en verano superan los 33 grados, con picos de 35 grados en algunas dependencias, mientras que en invierno se han llegado a registrar solo 5 grados.
Al respecto, ha advertido de que se está incumpliendo la normativa laboral en materia de prevención de riesgos y de seguridad laboral, y ha criticado que el Ministerio del Interior destine «millones» a las policías autonómicas y no se preocupe por las condiciones en que trabajan policías nacionales o guardia civil.
Por su parte, la secretaria provincial del SUP, Sandra Fernández, ha recordado que no solo los funcionarios, sino también los ciudadanos, están sufriendo los rigores de la falta de climatización en la Comisaría. «Los ciudadanos y los policías merecen un trato de primera», ha apuntado, y ha lamentado que, aunque los responsables han asegurado que llevarán a cabo un arreglo, «no se ha hecho nada».
Desde Jupol, el secretario provincial, Alejandro Cousiño, ha explicado que esta situación de «estrés térmico» en la Comisaría se está padeciendo desde el año 2015, y ha recordado que el edificio, construido en hormigón, acero y con grandes cristaleras, hace que la situación sea «insoportable» sin climatización adecuada.
De hecho, los sindicatos policiales han explicado que hay estancias de la Comisaría, como las de los grupos de investigación, que están «vacías», porque los agentes son incapaces de trabajar allí. Asimismo, han advertido de que algunos espacios, en los que se ofrece atención a los ciudadanos, como oficinas de denuncia, o de expedición de DNI y pasaporte, también alcanzan muy altas temperaturas.
«En lo que va de mes se han presentado 15 quejas de ciudadanos por el calor que pasan, y seis de ellas en una misma tarde. Mareos, vómitos, hasta hubo que quitarle la ropa a un bebé…», han criticado.