Una campaña impulsada por la Fundación Franz Weber, con la recogida, informa, de más de 60.000 firmas, pide cerrar las 23 granjas peleteras gallegas.
«Varios años después de la crisis de la Covid-19 no ha habido grandes cambios en la vigilancia de estos recintos», señala en un comunicado en el que asegura que «al menos 23 instalaciones de este tipo permanecen en funcionamiento en territorio gallego, la inmensa mayoría en la provincia de A Coruña».
Además, señala que su existencia se da en un contexto de «acusado descenso por parte de la ciudadanía del ‘consumo’ de los productos derivados: abrigos, estolas, gorros y otras prendas con piel de visón·.
Los naturalistas acompañan su demanda con más de 60.000 firmas recogidas a través de la plataforma Change.org, donde inciden en que es «un negocio cruel que contamina suelos y aguas subterráneas, y crea un impacto negativo para la biodiversidad autóctona, por las continuas fugas de los visones americanos de las jaulas, como se han detectado incluso en el Parque Nacional Illas Atlánticas».