El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha instado este miércoles a la Xunta de Galicia a adquirir y rehabilitar los inmuebles colindantes al edificio de Praza do Peñasco 5, en el Casco Vello vigués, y donde se produjo un derrumbe que obligó a parar las obras de construcción de un albergue de peregrinos (promovidas por la Consellería de Cultura y Turismo) en los números 7 y 9 de esa plaza.

En una rueda de prensa, el regidor ha confirmado que el Ayuntamiento se ha puesto en contacto con la Xunta, así como con los propietarios del edificio donde ocurrieron los desprendimientos, para instarles a que tomen las medidas necesarias para garantizar la seguridad. Todo ello después de que hubiera que desalojar a varios vecinos de casas colindantes y reacomodarlos en un hotel de la ciudad.

Según el alcalde, los técnicos apuntan, a falta de estudios más detallados, a las obras que realiza la Xunta en los números 7 y 9 como posible causa de esos desprendimientos, y ha subrayado que la administración autonómica, en cooperación con los dueños del inmueble afectado, debe acometer el vaciado y demolición del edificio.

Pero el regidor ha ido más allá, y ha instado a la Xunta a adquirir los inmuebles colindantes con el solar donde está construyendo el albergue, para acometer una actuación integral y hacerse cargo de la rehabilitación.

«MEDIDAS URGENTES DE SEGURIDAD»

Por su parte, la Xunta de Galicia ha comunicado que, de acuerdo con los propietarios del inmueble de Praza do Peñasco 5, adoptará «medidas urgentes de seguridad» que serán «de aplicación inmediata», en base a las indicaciones del Ayuntamiento, que es el que tiene las competencias en materia urbanística.

Así, un técnico designado por la Axencia Turismo de Galicia dirigirá el proyecto para «estabilizar las edificaciones afectadas». Entre otras medidas, han detallado fuentes autonómicas, se instalarán apuntalamientos provisionales, se realización acciones preventivas y de protección para operarios y viandantes, se colocará señalización de advertencia y se desmontarán elementos susceptibles de caída.

En todo caso, el gobierno gallego ha precisado que la obra de construcción del albergue (que está paralizada de forma preventiva), «se estaba desarrollando con normalidad» y cuenta con todos los permisos y licencias oportunos.

Además, han añadido desde la Xunta, el desprendimiento tuvo lugar por la noche, cuando la empresa constructora no trabajaba en la zona, y las causas pueden estar relacionadas con las lluvias de las últimas semanas o con el estado de conservación del lugar.