El BNG de Vigo ha presentado sus enmiendas al reglamento municipal del transporte, entre las que figuran propuestas como establecer el billete gratuito para menores de 14 años de edad, o implantar los bonos de transporte, para que el bus urbano «sera una alternativa real al coche privado».
Así lo ha trasladado el concejal nacionalista, Xabier Pérez Igrexas, en una rueda de prensa en la que ha vuelto a criticar que el proyecto de reglamento permite «perpetuar» el modelo concesional de un servicio que se podría prestar desde lo público o través de una empresa municipal.
Además de la gratuidad para los niños y de los bonos de transporte, el edil del BNG ha planteado también que se extienda hasta los 60 minutos el tiempo que tienen los viajeros para hacer el transbordo con cargo al mismo billete (actualmente es de 45 minutos), o que se facilite el acceso de mascotas al transporte público.
Otras de las propuestas son duplicar el número de plazas reservadas para personas con movilidad reducida o garantizar un mínimo de dos plazas por autobús para sillas de ruedas. Asimismo, se pide que, aunque se mantenga la prohibición de ejercer la mendicidad en el interior de los buses, se supriman las multas por este motivo; y que se reduzcan las sanciones económicas por viajar careciendo de billete o sin validar la tarjeta de transporte.
El BNG reclama también que el Ayuntamiento exija a la empresa concesionaria del servicio que cumpla la normativa laboral con respecto a las condiciones de sus trabajadores, así como los derechos de los representantes sindicales.
Xabier Pérez Igrexas ha hecho otra solicitud: que se revise el texto del proyecto presentado por el gobierno local, porque «tiene faltas de ortografía» y fragmentos escritos en castellano, y que se redacte con un «lenguaje inclusivo desde el punto de vista del género».
DISEÑO DE LÍNEAS
Por otra parte, el concejal del BNG ha reclamado al gobierno de Vigo que permita la participación de colectivos de la ciudad en el diseño de las líneas, y ha advertido de que ese mapa de recorridos no puede responder únicamente a la «rentabilidad», sino que debe concebirse como un sistema de transporte que atienda a todos los barrios y parroquias, y que permita conectar con las infraestructuras básicas de la ciudad (puerto, aeropuerto, hospitales, centros educativos, …).
Pérez Igrexas ha informado de la presentación de estas enmiendas tras constatar que la consulta realizada por el gobierno local el pasado verano, a través de la web municipal, y en la que se pedían sugerencias para este reglamento de transporte, era «una farsa».
Según ha apuntado, la aplicación de las propuestas presentadas por esa vía ha sido «prácticamente cero», lo que confirma que la consulta «era para dar apariencia de participación» en la elaboración del documento.
