La Guardia Civil se ha incautado de casi 1.300 conchas, corales y otros elementos procedentes de fauna protegida, así como piezas de fósiles localizados en un establecimiento comercial de Vigo, expuestos para su venta.
Según han informado fuentes del Instituto Armado, estas especies están amparadas por el Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (CITES).
Durante la inspección del local, realizada por efectivos de Seprona de Vigo, con colaboración del Servicio Oficial de Inspección, Vigilancia y Regulación del Comercio Exterior (SOIVRE), se localizaron, entre otros especímenes, 462 conchas de almeja gigante, 446 piezas de coral, 79 conchas de cefalópodos, 21 sierras de pez y 17 pulseras de tortuga Carey, todo ello sin la preceptiva documentación que acreditase su importación legal.
Algunas de estas especies están consideradas en peligro de extinción, mientras que otras no lo están, pero podrían estarlo si no se controla y regula su comercio.
Además de esas piezas, en el mismo establecimiento se intervino casi medio millar de fósiles porque no se acreditó su legal posesión, y por incumplir la normativa relativa a patrimonio histórico, natural y biodiversidad.
Entre los fósiles intervenidos se identificaron piezas de moluscos, equinodermos, un colmillo, dos ‘netsukes’ de marfil, un collar y restos de marfil de mamuts, además de siete valvas de bivalvo Pinna Nobilis, un ánfora romana del Siglo I, un hacha y dos puntas de lanza de piedra prehistóricas.
El material decomisado ha sido precintado y depositado en el propio establecimiento, a disposición de las autoridades competentes (Fiscalía de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, la administración de Aduanas, y la Xunta de Galicia).