La Xunta ha denegado las autorizaciones administrativa y de construcción del parque eólico San Vicente de Noal, proyectado en el municipio coruñés de Porto do Son, al no superar el trámite ambiental por su impacto sobre patrimonio arqueológico y aves.
En la resolución que publica el Diario Oficial de Galicia (DOG), la Dirección Xeral de Enerxías Renovables decreta el archivo del expediente de este proyecto eólico y la cancelacion de la garantía de más de 100.000 euros depositada por Cartera Vimira 26, filial del Grupo Villar Mir.
Este aerogenerador a instalar, con 2,7 megavatios de potencia, se situaba en una zona de la Serra do Barbanza con alta densidad de eólicos, por lo que su construcción provocaría un impacto «crítico» para las aves por su confluencia con el parque Graiade, además de «ciertas deficiencias» en la documentación remitida al respecto.
Entre otras cuestiones, la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural emite informes desfavorables por sus posibles daños en patrimonio arqueológico, pues en el entorno de 200 metros de la obra se encuentra la mámoa da Lagoa de Cabrais y el petróglifo de Minguelis 2, así como otros bienes más alejados. Y es que determina que la documentación presentada por la empresa «no evalúa adecuadamente el impacto en esta zona. A esto se suma una afección a hórreos catalogados, sin una evaluación correcta.
Paralelamente, otras pegas a este proyecto que ha denegado el Gobierno gallego pasaban por «un muy intenso impacto visual, provocado principalmente por las dimensiones y posición del aerogenerador», que será visible desde la Serra do Barbanza y desde numerosos miradores.