La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS) ha concluido la fase previa de traslado de náyades, necesaria para la reconstrucción de la Aceña de Olga, en el río Miño a su paso por Lugo.
«La retirada de náyades, mejillones de río, que concluye este viernes con éxito, era uno de los retos importantes de esta obra», ha subrayado durante esta jornada el presidente de la CHMS, José Antonio Quiroga.
La relevancia de esta fase previa queda de manifiesto, ha explicado, en la «altísima cantidad de náyades» que movieron, 13.895 bivalvos en total, con una densidad media de 5,6 por metro cuadrado.
Por ello, la «importante presencia» de náyades es un indicador «clarísimo de la gran calidad ecológica» de río Miño a su paso por Lugo.