Las emisiones de gases invernadero provocadas por el transporte subieron en las cuatro provincias gallegas, según un estudio del Observatorio Gallego de Acción Climática. Mientras, la provincia de A Coruña lidera las emisiones gallegas de gases invernadero.
Los datos están recogidos en el informe ‘Las emisiones provinciales de gases de efecto invernadero en Galicia 81990-2022), basado en un inventario oficial de emisiones del Ministerio para la Transición Ecológica.
La provincia de A Coruña concentra el 51,7% de las emisiones brutas de gases causantes de cambio climático en Galicia, «lo que no solo tiene que ver con su peso en la población y en el PIB gallegos, sino también en las principales industrias energ*ticas fósiles», añade. La sigue Lugo con el 20,9 por ciento.
Con todo en 2022 con respecto a 1990, las emisiones se redujeron el 33 por ciento en Galicia. «Esta bajada se sustentó en la disminución a la mitad de las emisiones en la provincia de A Coruña, sobre todo la sustitución del carbón en la producción eléctrica».
Por el contrario, las emisiones crecieron de forma importante en Ourense (12,5%) y en Pontevedra (16,5%). En Lugo, también se recortaron (-10,3%), «pero fue por la parada temporal de planta de aluminio de Alcoa San Cibrao».
El transporte es el único sector donde subieron las emisiones en todas las provincias entre 1990 y 2022, «lo que casi ocurrió también en el caso de las emisiones de origen no fósil de la agricultura y la ganadería, donde solo en Ourense no aumentaron sino que se estabilizaron».