Todos los carriles del puente de Rande que permanecían cerrados después de que un camión perdiese la carga han sido ya reabiertos, según fuentes de la Guardia Civil consultadas por Europa Press.
En concreto, los servicios de emergencia se vieron obligados a cortar, en la noche de este lunes, los dos carriles centrales en ambos sentidos del puente, donde un camión chocó contra la medianera y perdió la carga.
Según la información recogida en el 112 Galicia, el accidente se produjo a las 21.30 horas del lunes en la AP-9, en el punto kilométrico 148, a su paso por Redondela. La primera persona que contactó con el 112 para alertar fue una vecina que se asustó por el estallido, posiblemente del reventón de una rueda. Después, el camión quedó girado con la cabeza tractora en los carriles del sentido contrario.
El vehículo fue retirado, pero los trabajos para la limpieza, retirada de los restos y recuperación de los elementos de seguridad de la vía continuaron varias horas más. Unas tareas que se desarrollaron desde la madrugada debido a las características de la carga del camión: un metal (óxido de magnesio) convertido en polvo, que solo se puede barrer.
De tal forma, fueron necesarias potentes máquinas que trabajaron en los carriles de ambos sentidos de la circulación hasta asegurar la completa retirada de esta sustancia y salvaguardar el entorno. No fue hasta las 09.00 horas cuando el puente pudo ser reabierto por completo.
Fue una noche de intenso trabajo tanto para los equipos de mantenimiento de la empresa concesionaria de la autopista como para los bomberos del Consorcio de Pontevedra, pues acudió personal de los parques de O Porriño y de O Morrazo y también los miembros del Grupo Supramunicipal de Emergencias de Mos. Por su parte, los Bomberos de Vigo fueron informados y prealertados por si en algún momento era necesaria su intervención.
El camión que se salió llevaba más de 26.000 kilos de óxido de magnesio en polvo, almacenado en 20 sacos de gran capacidad. Muchos de ellos resultaron dañados a causa del impacto, por lo que el polvo se desparramó por la calzada. Igualmente, al producirse el accidente justo en el puente de Rande, sobre la ría de Vigo, había que extremar la precaución para evitar que ese polvo pudiera alcanzar el espacio marino.
El conductor del camión fue atendido in situ por un equipo del 061, si bien no fue necesaria su evacuación al resultar ileso.
Agentes de la Guardia Civil de Tráfico acompañaron y apoyaron los trabajos de los equipos de emergencias a través de la organización de la circulación y la puesta en marcha de recorridos alternativos.