La que fuera presidenta de Adif durante la pandemia, Isabel Pardo de Vera, ha explicado este viernes en el Senado que no conocía Soluciones de Gestión, la empresa vinculada a la trama Koldo, antes de contratar con ella la compra de hasta cinco millones de mascarillas. A su vez, ha dicho que ella no eligió a esta sociedad, sino que solamente firmó la «declaración de emergencia» del contrato en base a sus competencias.
Ante preguntas de los grupos en la comisión de investigación del Senado sobre las ramificaciones del caso por el que se investiga a Koldo García –ex asesor del entonces ministro de Transportes, José Luis Ábalos–, Pardo de Vera se ha remitido a la declaración que realizó este jueves en la comisión del Senado el jefe de personal de Adif, Michaux Miranda Paniagua, en la que explicó el procedimiento por el cual encomendaron a este organismo público la contratación de mascarillas y cómo acabaron firmando la declaración de emergencia con la empresa vinculada al caso Koldo.
Como ya hiciera también este jueves el ex presidente de Puertos del Estado Francisco Toledo, Pardo de Vera ha explicado que el Ministerio de Transportes les encomendó la contratación de mascarillas porque disponían de tesorería, unas cuentas saneadas y por su conocimiento en esta materia de contratación.
MÁS ÁGIL CONTRATAR DESDE ADIF
Asimismo, ha apuntado que era más ágil administrativamente contratar a través de Adif que del ministerio y sobre si recibió presiones para contratar con Soluciones de Gestión, la exalto cargo ha reseñado que todo el mundo en Transportes quería que los contratos de emergencia se formalizaran «con agilidad» porque el personal necesitaba las mascarillas.
«Había una presión autoimpuesta y había presiones referidas a la agilidad, la inmediatez, la calidad y la coordinación porque el transporte y la llegada del suministro se hacía desde el ministerio», ha detallado.
Pardo de Vera ha mostrado su total confianza en la gestión de ese contrato llevaba a cabo por el director general que la realizó, ha subrayado que en los contratos de emergencia no era exigible la solvencia y ha señalado, igual que Miranda Paniagua, que uno de los motivos por los que se eligió a esa empresa fue porque ya «había aportado mascarillas».
ALDAMA EN EL MINISTERIO
Según ha indicado, se presentaron cuatro ofertas, dos de empresas a las que ya se habían adquirido epis pero que no entonces no estaban en disposición de suministrar mascarillas, y otras dos a las que sí se contrató con este fin, una de las cuales era Soluciones de Gestión.
La compareciente ha explicado que vio «unas cuantas veces» en el ministerio al empresario Víctor de Aldama, algunas con Koldo García, que cree recordar que fue quien se lo presentó, posiblemente antes de la pandemia. Según ha relatado, sólo mantuvieron alguna vez conversaciones de pasillo, pero ella desconocía a qué se dedicaba, jamás le trató como empresario y no sabía de su presunta vinculación» con esa empresa, de la que no había oído hablar.
Además, ha retratado a Koldo García como una persona con «un perfil un poco atípico» y «de carácter insistente» con lo que le encargaba el ministro José Luis Ábalos. En concreto, ha dicho, se mostró «insistente» con la compra de mascarillas porque era el ministerio el que organizaba los vuelos para garantizar el suministro. «Tenían los aviones preparados y yo tenía que firmar la declaración de emergencia para que esos aviones no volviesen vacíos», ha recordado.
TRATAN A LOS COMPARECIENTES COMO «DELINCUENTES»
Preguntada si el asesor le hizo sentir «incómoda», ha respondido que le ha hecho sentido «incómoda mucha gente» pero que su labor era que las cosas «salieran adelante». Sobre si trasladó esa incomodidad al ministro ha admitido que con Ábalos pudo tener «miles y miles de conversaciones sobre miles y miles de cosas» que le «incomodaban».
Durante su comparecencia, Pardo de Vera ha tenido varios encontronazos con el portavoz del PP Luis Santamaría, al que ha reprochado que intentase vincularla con prácticas corruptas. «No me vincule con la corrupción, no presuponga que soy una delincuente», le ha espetado, antes de quejarse de que en la comisión de investigación se ha tratado a algunos comparecientes como si lo fueran y ha puesto el ejemplo de Miranda Paniagua.
Ese comentario ha provocado la reacción del presidente de la comisión, el ‘popular’ Eloy Suárez, quien ha negado la mayor, pero la comparecencia se ha ratificado en su afirmación. «Me permitirá decir la verdad, que es a lo que he venido», ha apostillado.
NO SE AMAÑABAN CONTRATOS
Además, cuando Santamaría insistía en que ella «no se enteraba de nada» de lo que pasaba en Adif, le ha replicado: «Yo me enteraba de muchas cosas, no sé si usted ha presidido una empresa de 12.000 trabajadores». También le ha apuntado que si hubiera tenido que estar al tanto de todos los asuntos por los que ella le preguntaba habría hecho «dejación» de sus funciones.
Es más ha dicho sentirse «orgullosa» del cumplimiento de la encomienda para la compra de material sanitario que se les encargó mediante orden ministerial. «Si la investigación judicial concluye que había una trama y que alguien se ha lucrado me sentiré profundamente frustrada y el disgusto será tremendo», ha confesado.
Santamaría también le ha preguntado sobre los audios conocidos esta semana que en los que el jefe de coordinación de inversiones de Adif, José Vicente Porras, daba a entender el posible amaño de un contrato. Pardo de Vera ha subrayado durante su etapa en la empresa «en absoluto» se recurría a esas prácticas y ha dicho «confiar ciegamente» en el actual presidente de Adif, Ángel Contreras, que fue su director general.